Cita clave esta tarde en La Catedral. El Athletic puede garantizar su continuidad un año más en la máxima categoría, además de meterse de lleno en la pugna por la competición europea. Los rojiblancos han sacado 10 de los últimos 12 puntos en liza y tan sólo han claudicado en tres encuentros en lo que va de segunda vuelta de campeonato.

Unos números, que si bien es cierto que en muchos casos han llegado exentos de buen juego, sitúan a los rojiblancos en una buena posición para vivir un final de Liga mucho más tranquilo y esperanzador que los dos años precedentes.

Enfrente, estará un Espanyol que llega tocado a San Mamés. Los de Valverde fueron la gran sensación de la primera vuelta, tramo que acabaron en puestos de Champions, pero se han desinflado por completo en estos últimos 10 compromisos. De hecho, los periquitos tan sólo han sumado tres triunfos en la segunda vuelta. Ahora, con 45 puntos, necesitan puntuar en Bilbo para seguir en la brecha y mantener distancias respecto a un nuevo competidor como puede ser el Athletic.

De cara al choque de esta tarde, Caparrós recupera a Ocio, ausente por problemas de rodilla en los dos últimos encuentros y Javi Martínez, que no pudo jugar en Huelva por acumulación de tarjetas. En cambio, el de Utrera pierde al sancionado Ustaritz y, lo que es peor, a Orbaiz para un mes.

Así, todo parece indicar que el once inicial estará formado por Armando en la portería: Iraola y Del Horno en los laterales; Ocio y Amorebieta en el eje de la zaga; Martínez y Fran Yeste en el doble pivote; Susaeta y Gabilondo en las alas; con Etxebe y Llorente en la punta de ataque.

Por su parte, el Espanyol llega a Bilbo con sólo una duda en el once, si alinear a Lola o Ángel en el pivote. Por lo demás, Valverde no podrá contar con los lesionados De la Peña y Lacruz.