Primera sesión del pleno de investidura
El PNV no logra una propuesta concreta que facilite el acuerdo
Mikel JAUREGI | DONOSTIA
El portavoz del grupo parlamentario del PNV, Josu Erkoreka, finalizó su intervención sin aclarar el sentido del voto a la inves- tidura de José Luis Rodríguez Zapatepo, quien en sus réplicas no ofreció a los jelkides motivos para apoyarle e incluso dio por descontado que se abstendrán en la votación de hoy.
En sus respectivas intervenciones, se intercambiaron agradicimientos mutuos. El diputado jeltzale saludó que el candi- dato a la Presidencia del Gobierno español «arriesgara a la mayor» en la pasada legislatura, en clara referencia a la situación política en Euskal Herria, «aunque luego fracasara», y le invitó a seguir arriesgando en ese ámbito «porque algunas cosas lo merecen. Si se decide a hacerlo, llámenos, cuente con nosotros». En ese sentido, le ofreció la posibilidad de buscar conjuntamente un «acuerdo para la convivencia» argumentando que «estamos condenados a entendendernos. Porque el dilema no es entendimiento sí o entendimiento no; el dilema es entendimiento o caos».
Tras indicar que «nosotros tenemos propuestas», llegaron los reproches. «A usted no le gustan las nuestras, ni las que buscan cambiar el marco ni las dirigidas a completar el Estatuto. Por eso le pregunto, ¿cuál es su propuesta?». En este punto, le reprochó el discurso «oscilante» del PSOE sobre este asunto.
«Hoy no es posible tener una idea cabal sobre lo que postula sobre el autogobierno», dijo, para traer a colación que el partido que dirige Zapatero, en los últimos años, «ha apostado por `más Estatuto'; después puso sobre la mesa el plan Guevara, con un perfil más vasquista; luego llegó el idilio con la izquierda abertzale, con varios pronunciamientos, como cuando declaró en el Congreso que respetaría las decisiones que adoptaran los ciudadanos vascos; después, los documentos de Loiola; y hoy, no sabemos dónde se encuentran».
En la vía hacia el entendimiento, advirtió Erkoreka a Zapatero, «debemos empezar por asumir la pluralidad vasca en toda su plenitud», por lo que consideró que «los marcos políticos que no intenten adaptarse a esa pluralidad no servirán» porque «nadie puede imponer sus proyectos a los ciudadanos».
Le felicitó por los resultados logrados el 9 de marzo en el Estado español y en la CAV, un mensaje que acompañó con «una pregunta que se hacen muchos vascos. ¿Para qué? Dígame para qué los utilizará».
El portavoz del PNV, que también tendió la mano para «jugar a pequeña», en alusión a políticas económicas, sociales o de infraestructuras, no desveló qué actitud adoptará su grupo sobre la candidatura de Zapatero. Lo que sí le trasladó es que no hay «créditos sin garantías» y que «el precio es un elemento esencial en la vida política».
«Aventuras, no»
José Luis Rodríguez Zapatero se mostró agradecido por el «apoyo leal» ofrecido por el PNV en el fallido proceso de negociación, alabando expresamente a Josu Jon Imaz. El candidato a volver a ocupar la Presidencia española, a quien no le gustó la metáfora del mus utilizada por Erkoreka sobre todo «a raíz de los últimos acontecimientos», manifestó su plena disposición a hacer «cuantos sacrificios sean necesarios» con el PNV y el Gobierno de Lakua «en todo lo que representa la colaboración, el entendimiento y la decisión de estar juntos en la lucha antiterrorista».
Zapatero destacó que «el único proyecto que el PSOE defiende para Euskadi es el del autogobierno y el respeto a la Constitu- ción y a las leyes», y emplazó a los jeltzales a dialogar y pactar con el PSE «para profundizar en el autogobierno y la convivencia». Los límites para ese acuerdo, agregó, «los conocen bien: las reglas democráticas, la Constitución y el Estatuto».
«Con el apoyo del 51% de los ciudadanos no se puede optar por una vía que sólo genera incertidumbre. ¿Cuál es mi respuesta? Seguridad y certidumbre, aventuras no. El PSOE no se subirá a un tren que no se sabe a dónde va. Ése es el marco», replicó el líder del PSOE.
La diputada de NaBai, Uxue Barkos, en su valoración sobre la primera intervención de Zapatero, coincidió totalmente con Erkoreka al indicar que resultó «poco precisa ya que no ha detallado propuestas concretas». En su opinión, «es muy difícil dar un sí a un discurso de estas características y, por lo tanto, en las próximas horas analizaremos si finalmente Nafarroa Bai se decanta por el no o se abstiene».
Apuntó que el discurso de investidura que Zapatero pronunció hace cuatro años era «una declaración de intenciones; ahora, sin embargo, son necesarias propuestas de hecho para hacer frente a los retos a los que estamos obligados a responder».
EA, que en esta legislatura no cuenta con representación en el Parlamento español, valoró también las palabras del líder del PSOE, que, a su juicio, suponen un cambio de estrategia en la lucha contra ETA, «asumiendo las tesis del PP que hemos visto que son totalmente ineficaces». El secretario de Comunicación, Mikel Irujo, lamentó que Zapatero corroborara lo manifestado la víspera por José Blanco, quien dio por derogada la resolución aprobada por el Congreso para autorizar el diálogo con ETA.
GARA