Otros dos palos evitaron que los rojillos marcaran más goles
Kameni regala tres puntos de oro
Los de Ziganda están encontrando fuera de casa las necesarias rentas que últimamente no consiguen administrar en propio feudo. Con la victoria de ayer en Montjuïc, los navarros encadenan su cuarta jornada foránea consecutiva sin perder lejos de El Sadar.
ESPANYOL 0
OSASUNA 1
Natxo MATXIN | IRUÑEA
Kameni es un amigo para la causa rojilla. Hace dos temporadas el portero camerunés ya dio muestras en El Sadar de ser capaz de hacer paradas inverosímiles, pero también de cometer los errores más infantiles y de ello se volvió a beneficiar ayer la escuadra navarra para traerse a Iruñea un botín con tres puntos de oro.
Si todo eran nubarrones negros tras la derrota ante el Recreativo -en parte porque se generaron demasiadas expectati- vas en un solo encuentro cuando todavía restan unas cuantas jornadas-, ayer la tempestad dejó paso a la calma gracias al primer gol que consigue Astudillo como osasunista, lo que prolonga, asimismo, la formidable última racha foránea del equipo.
Ocho puntos de doce son los que ha cosechado la escuadra navarra en sus cuatro encuentros más recientes lejos de El Sadar, lo que ha permitido contrarrestar los malos resultados caseros ante Betis y Recreativo, y pone la permanencia en bandeja de plata a falta de conseguir los tres o cuatro puntos más que parece harán falta para alcanzar el objetivo de la presente temporada.
Los rojillos no fallaron ante el Espanyol, un rival en caída libre que sumó ayer su décima derrota en lo que va de segunda vuelta y su cuarto partido consecutivo sin marcar. Partiendo de esa consigna, la de que el contrario no perforara la portería propia, los de Ziganda calcaron el partido disputado quince días antes contra el Getafe, a la espera de esa jugada de estrategia que les diera los tres puntos.
Con una gran seriedad defensiva, que sólo se vio peligrar por las ayer frágiles manos de Ricardo, Osasuna llevó las riendas del choque, en el que los periquitos no justificaron su condición de anfitriones. Sólo los palos -uno en el primer minuto de juego a cargo de Plasil y otro de Juanfran pasado el cuarto de hora del segundo periodo- evitaron otra vez que la diferencia en el marcador fuera todavía más amplia.
El bagaje local no le llegaba ni a las suelas de los zapatos. Dos insulsos cabezazos de Valdo -uno de los más activos hasta que fue relegado al lateral- fueron todo lo que pudieron generar durante los primeros cuarenta y cinco minutos. A nadie le podía extrañar que camino de vestuarios fueran despedidos con música de viento por parte de la grada.
Riera, a escena
El choque siguió teniendo tonos claramente rojizos hasta que la entrada de Riera, castigado con la suplencia por irse de la lengua sobre su reciente poca participación, reanimó parcialmente al Espanyol. Lo que le costó a Azpilikueta tomarle la medida al mallorquín, tarea en la que también ayudó Krutxaga ante la pericia del de Manacor.
Demasiado infortunio habría sido que en la jugada desgraciada del día Tamudo la hubiera clavado consiguiendo el empate, pero vista la suerte de que está gozando Osasuna en esta campaña... Monreal, omnipresente en labores defensivas y atacantes, hizo justicia sacando el balón debajo de los palos.
¿Serán capaces los de Ziganda de encadenar el domingo la que sería por primera vez segunda victoria consecutiva? La experiencia no invita al optimismo, pero el premio es demasiado gordo como para dejarlo pasar.
Hace una semana todo fueron noticias negativas, ni siquiera la coyuntura de resultados de los rivales fue favorable para los intereses rojillos. Ayer, sin embargo, todo fue de color de rosa. A la victoria osasunista en Montjuïc se sumaron marcadores que hicieron todavía más importante el triunfo navarro en el estadio periquito.
El mejor dato es que se amplía considerablemente la ventaja con el Zaragoza, conjunto que sigue marcando el descenso, hasta los seis puntos matemáticos, siete reales si tenemos en cuenta que a Osasuna le favorece el gol average con los maños. A falta de seis encuentros por disputarse y a tenor de la línea de juego de los de Manolo Villanova -sólo la suerte evitó que salieran derrotados del Alfonso Pérez-, parece una diferencia lo suficientemente amplia. El duelo Zaragoza-Recreativo de la próxima jornada va a resultar clave para conocer la cifra de la permanencia.
Ni los andaluces ni el Valladolid consiguieron sumar los tres puntos -los castellanos empataron in extremis-, mientras que los rojillos ya han superado al Valencia, al que la final copera les puede acabar pasando factura, y tienen a tiro de piedra a Betis, Getafe y Mallorca.
Osasuna recupera el decimocuarto puesto en la tabla clasificatoria, una ubicación en la que se ha movido durante las últimas jornadas. La diferencia con respecto a esas anteriores semanas es que la distancia con el descenso se ha visto incrementada, ahora a seis puntos.
José Ángel Ziganda respiró en la sala de prensa del Espanyol después de que sus pupilos consiguieran sobreponerse de manera inmediata a la derrota ante el Recreativo. «El equipo ha estado muy serio, con serias opciones de conseguir un segundo gol y, después de los dos tropiezos consecutivos que hemos tenido en casa ante Betis y Recreativo, ha sabido reaccionar muy bien ante una semana que se ha hecho muy larga», explicó.
Puestos a analizar el choque, el técnico rojillo no vio tan fácil la consecución de la victoria como algún periodista local le transmitió. «Con lo que nos estamos jugando, sólo puedo decir que sufrimos durante los noventa minutos y el Espanyol no ha generado ocasiones claras porque Osasuna ha hecho un gran desgaste y trabajo», especificó.
El Cuco no acabó aquí con los halagos hacia los suyos, sino que insistió en que la actual plantilla «es un grupo muy solidario, que está muy comprometido con el escudo y la camiseta rojillos, de verdad que hay una buena base para crear un equipo de futuro».
Por poner un pero a la victoria, la escuadra navarra sigue sin ser eficiente a la hora de finiquitar los partidos: «En el descanso hemos hablado de no encerrarnos y seguir igual, pero al no acertar a la hora de conseguir el segundo tanto nos hemos ido echando hacia atrás a la vez que el Espanyol ha apretado con más corazón que juego. Ha sido un partido parecido a los que hemos perdido en casa, sólo que hemos marcado a balón parado».
El juvenil de División de Honor entrenado por Manolo Los Arcos goleó al Lagunak, al que se impuso por un claro 0-5. Los rojillos siguen en la segunda posición, empatados a 69 puntos con el Valladolid, quien solventó con un 4-0 su compromiso ante el Numancia.
Para hacerse una idea del diferente potencial ofensivo que ayer se vio sobre el césped de Montjuïc basta con indicar que Osasuna remató el triple de veces que el Espanyol. Los rojillos lo hicieron en diez ocasiones -la mitad a puerta y dos palos- frente a tres de los locales.
Natxo Monreal no podrá jugar este próximo domingo ante el Deportivo al ver la quinta amarilla tras cortar una contra periquita. El de Eskirotz, una de las revelaciones de la presente temporada, está en su mejor momento de forma y será una sensible baja.