LAB denuncia que una empresa tendrá acceso a datos fiscales de los contribuyentes
GARA |
LAB denunció ayer que la Diputación de Bizkaia ha subcontratado la tramitación de la declaración de la Renta 2007, por lo que «dará acceso a una empresa privada a la base de datos fiscales de los contribuyente». Criticó, en este contexto, «la insaciable política privatizadora del PNV, que no duda en desviar trabajos y datos confidenciales y delicados a empresas privadas que obtienen grandes beneficios a costa de contratar a sus trabajadores en condiciones precarias».
Censuró de esta manera que Lantik, empresa pública foral dependiente del departamento de Hacienda, «ha procedido a subcontratar los trabajos que hasta ahora realizaba, relativos a la declaración de la renta del año 2007», que comienza el próximo 5 de mayo. «De esta forma una sociedad anónima, al margen de control público de ningún tipo, se encargará de la información telefónica, grabación de las declaraciones y escaneo de las mismas», explicó el sindicato, que añadió que, para ello, «contará con acceso a los datos fiscales de Hacienda, es decir, a la base de datos en la que se contiene la información económica de los contribuyentes de Bizkaia».
LAB explicó que los trabajos relacionados con la declaración de la renta se realizaban por personal de Hacienda, pero «con el paso del tiempo los trabajos de grabación escaneo, información telefónica y cita previa pasaron a realizarse por la empresa pública foral Lantik, mediante la contratación en precario de personal temporal».
Lamentó que ahora la Diputación «ha dado un paso más» y ha decidido «dejar información confidencial y delicada del conjunto de los contribuyentes vizcaínos en manos de una empresa privada».
Denunció «la privatización de unos servicios que, por confidencialidad y formación, deberían ser realizados por empleados forales» y destacó que «no es la primera vez que la Diputación deja en manos privadas datos sensibles de contribuyentes», ya que expedientes del Departamento de Acción Social relativos a consultas médicas «son gestionados también por empresas privadas». «¿Quién controla el tipo de utilización que estas empresas privadas dan a la información confidencial que manejan? Visto el nulo seguimiento del ente foral en casos recientes, desde LAB nos tememos lo peor», apuntó.