«Ganar o ganar». La celebre frase de Vujadin Boskov ilustra perfectamente la necesidad que tiene Osasuna hoy para vencer ante el ex equipo del histórico técnico serbio. Y es que si la visita del Real Madrid a Iruñea suele contar con todos los alicientes para vivir un partido intenso, las circunstancias de la jornada hoy la hacen más especial. Por un lado, Osasuna, con 40 puntos, se encuentra necesitado después de su mala racha como local y de los recientes errores arbitrales. Una victoria, además del subidón moral para sus seguidores, supondría dar un paso de gigante en el camino hacia la salvación y abrir hueco sobre el Recreativo.

Por su parte, el Real Madrid llega a la capital navarra con más de media Liga en su bolsillo. Los blancos necesitan tres puntos para proclamarse campeones y tienen ganas de hacer en El Sadar, un campo tradicionalmente adverso para ellos. Circunstancia que se han encargado de recordar y magnificar diferentes medios españoles a lo largo de toda la semana.

Para hacer frente al equipo de Schuster, el Cuco Ziganda no podrá contar con Juanfran, ya que su contrato le impide jugar frente a su club de origen. Otro ex madridista, Javi Portillo, tiene todos los boletos de ser la gran novedad del de Larraintzar en el equipo. El de Aranjuez ocuparía la punta de ataque en detrimento de Sola.

El técnico navarro, que no ofrecerá la relación definitiva de convocados hasta este mediodía después de una última sesión, compareció ayer ante los medios. El de Larraintzar destacó que «las sensaciones son positivas y mañana va a ser así aunque habrá un contrario que también quiere jugar y ganar, pero creo que nosotros mañana vamos a hacer un buen partido, sin preocuparse de si el Madrid es campeón o no, tenemos que preocuparnos por lo nuestro».

En cuanto al equipo blanco, Schuster recupera a Cannavaro y duda entre Robben o Robinho. El alemán dará continuidad a Saviola tras destacar en el partido ante el Athletic.