Dos artefactos explosivos colocados en sendas excavadoras de la empresa Amenabar estallaron durante la madrugada del lunes en la ladera de Santa Bárbara, entre Hernani y Urnieta.

La Ertzaintza no informó de ello hasta las 19.00, después de que la Central de la DYA en Bizkaia hubiera recibido, a las 17.15, una llamada en nombre de ETA que anunciaba de la colocación de los artefactos.

La llamada a la DYA se habría realizado desde una cabina telefónica situada en la calle Juan de Urbieta de Hernani, por lo que agentes de la Ertzaintza mantuvieron acordonada la citada calle desde las 18.00 hasta las 20.30. La Policía autonómica, según precisó Interior en un comunicado de prensa, tuvo constancia de la explosión pasadas las 2.30, tras la llamada de varios vecinos de la zona; pero, según apuntó, varias patrullas de la Ertzaintza se personaron en el lugar sin encontrar indicio alguno de la explosión.

Sobre las 8.15, sin embargo, trabajadores de la obras de la Variante de Urnieta alertaron de nuevo a la Ertzaintza informando de un sabotaje sufrido en dos máquinas. Patrullas de la Ertzaintza, junto a agentes de la Unidad de Desactivación de Explosivos de este cuerpo, volvieron a personarse en la zona y esta vez sí pudieron observar da- ños materiales en las dos máquinas de obra.

Recipientes metálicos

Tras recoger diversos restos y analizarlos, la Ertzaintza indicó que se trataría de «sendos recipientes metálicos conteniendo posiblemente amonal», aunque no determinó la cantidad de explosivo utilizado. En la nota, también indican que mantienen abierta la investigación para esclarecer los hechos.

Nada más conocerse lo acaecido en Hernani, la mayoría de los medios de comunicación relacionaron el ataque con la oposición al TAV, detallando que la máquinas atacadas pertenecen a la empresa Amenabar, compañía adjudicataria de las obras del TAV. Precisaron que esta empresa forma parte de una UTE que resultó adjudicataria del tramo Aramaio-Arrasate.