ETA ha ocasionado grandes desperfectos en el Club Marítimo del Abra de Las Arenas de Getxo con la segunda furgoneta-bomba que hace explotar en cinco días. La sede en la que el Círculo de Empresarios Vascos organiza coloquios con personalidades políticas españolas y que, a su vez, ejerce como el club que reta por parte del Desafío Español en la próxima Copa América, suspenderá todas las actividades de los próximos meses, después de que la organización armada hiciera explotar en la madrugada de ayer 60 kilos de explosivo frente al edificio. Pese a que su estructura no ha quedado dañada, sufrió graves destrozos.

Cincuenta minutos después de la medianoche de ayer, momento en el que un comunicante advirtió a la DYA en nombre de ETA, una bomba «muy potente» colocada en un Citröen Berlingo explotó frente al edificio del Club Marítimo del Abra. La deflagración causó importantes daños en el edificio atacado, donde abrió un profundo socavón además de romper cristales y tabiques, al igual que en las viviendas de la zona, donde la onda expansiva rompió los cristales de varios edificios. El Ayuntamiento de Getxo habilitó por la mañana una oficina de atención para los afectados.

«Reuniones intensas» de las FSE

El consejero de Interior de Lakua, Javier Balza, aseguró que la bomba empleada en Getxo fue «muy potente», ya que, además de contener 60 kilos de un explosivo que aún no han podido determinar, el artefacto estaba «direccionado» hacia el edificio y con una composición similar al encontrado por un paseante en enero en el barrio de Azkorri.

Balza volvió a subrayar que «no se puede poner en duda» la capacidad operativa con la que cuenta ETA, y aseguró que en los últimos días los mandos de las FSE están manteniendo «reuniónes intensas», en coordinación con el Ministerio español del Interior, que dirige Alfredo Pérez Rubalcaba.

El consejero de Lakua afirmó que la organización armada cuenta con «una red de legales bastante potente que le está dando cobertura a sus actuaciones y, evidentemente, eso cuesta desmontarlo».

Más en concreto, Javier Balza insinuó que ETA tiene «una estructura que se sitúa en Bizkaia, linde con Gipuzkoa, que es lo que se está tratando de investigar». Acto seguido, y por dos veces, Balza subrayó que «lo que sí podemos es garantizar el compromiso del conjunto de las fuerzas de seguridad por resolver esta situación».

Además de la llamada que en nombre de ETA alertó de la colocación de la furgoneta-bomba, realizada con una hora de antelación, un empleado que vigilaba los barcos atracados en el muelle avisó también a la Ertzaintza después de ver «a unos encapuchados abandonar una furgoneta en medio del paseo peatonal» de la calle Zugazarte, según afirmó el director del club, Javier Chávarri. Según las agencias, para cuando el citado trabajador abandonó el edificio junto a una segunda persona, la Policía Autonómica había acordonado todo el perímetro que rodea el edificio.

Tercer ataque contra el Club

El hecho de que los policías no desalojasen a los dos trabajadores del Club Marítimo de Getxo desembocó en críticas contra la Ertzaintza. Denuncias que también realizó una vecina de un edificio colindante, a la que la Policía Autonómica ni desalojó ni tampoco le dio el aviso sobre la existencia de una furgoneta-bomba.

Javier Chávarri, director del Club Marítimo del Abra, que recientemente había sido reformado, explicó que los principales daños que ha sufrido el edificio se produjeron en las zonas orientadas hacia el mar, de la planta baja y el tercer piso, mientras que en los locales situados en la Avenida Zugazarte -en la otra cara del edificio donde explotó bomba- los desperfectos fueron menores gracias a la viga central de hormigón.

Sin embargo, el director indicó que la fachada acristalada del edificio actuó como metralla potenciando las consecuencias de la explosión en el interior de las instalaciones. También recordó que con la de ayer es la tercera vez que ETA atenta contra éste club; también lo hizo en 1972 y 1973, de forma seguida.

Sin embargo, la de ayer no ha sido la única ocasión en la que ETA actúa en Getxo desde que en junio de 2007 rompiera el alto el fuego. Un dato que recordó la Junta de Portavoces del Consistorio del municipio vizcaino en la nota de repulsa que emitió por la mañana. Sin ir más lejos, el pasado 11 de noviembre la organización armada atentó contra el Juzgado, y el 31 de enero un paseante encontró en la zona de Azkorri un barril de cerveza que contenía en su interior 40 kilos de amonal. El consejero de Interior de Lakua se refirió a ése hallazgo e indicó que el explosivo empleado en el ataque de ayer era parecido a aquel.

En el acuerdo adoptado por la Junta de Portavoces del Ayuntamiento vizcaino, gobernado por el PNV y en el que están representados el PP, el PSE y EB, se exige a ETA que se «disuelva de una vez y para siempre de forma inmediata, respetando de esta forma la voluntad abrumadoramente mayoritaria de la sociedad vasca». Además, realiza un llamamiento para que «desde los instrumentos del Estado de Derecho y desde la unidad democrática, trabajemos todos por la deslegitimación política y social del terrorismo y su derrota definitiva».

El Ayuntamiento ha mostrado mediante ese texto su «hartazgo y hastío» por ser «una vez más» escenario de ataques de ETA. De la misma manera que se solidarizó c0n el Marítimo de Las Arenas, el Consistorio de Getxo mostró su «rechazo más absoluto a quienes practican la violencia y el terrorismo».