Joseba ITURRIA | DONOSTIA

La primera jornada de descanso del Giro de Italia estuvo marcada por el anuncio oficial por parte del equipo Astana de que unas radiografías sacadas a Alberto Contador han revelado que sufre una pequeña fisura en la cabeza del radio del codo izquierdo sufrida tras caerse en la octava etapa, desde la que arrastraba unos dolores que le llevaron ayer a realizarse pruebas.

El comunicado de Astana incluía unas declaraciones del ganador del último Tour en las que deja claro que disputará la contrarreloj de hoy y que quiere seguir en carrera: «No pienso abandonar. Mientras me entrenaba hoy he tenido dolores en mi codo, pero puedo hacer los esfuerzos habituales. Entonces, ¿por qué voy a dejar la carrera? Este es uno de los grandes monumentos del ciclismo y yo soy duro, así que me quedo, cada día mis piernas están mejor. Ganar una gran Vuelta lleva mucho trabajo, suerte y salud. Por desgracia tener una pequeña fisura provoca que el viaje hasta Milán no será nada fácil, pero estoy muy motivado y lucharé contra todos los dolores».

Su equipo, protagonista

La noticia de la leve lesión de Contador centrará la atención de la crono de hoy. El madrileño entendía que «el trazado me favorece, es bastante duro y el asfalto es bueno, lo que me viene bien para no sufrir con el codo. Espero que las fuerzas me respondan y no tenga problemas en las subidas al ponerme de pie en la bici. En principio voy a ver cómo evoluciona la fractura, pero creo que no me dará mayores problemas, aunque me sienta bastante limitado al agarrar el manillar. Por el momento tengo buenas vibraciones y a falta del resultado de la crono, soy optimista a la hora de seguir en el Giro».

Contador ya afrontó la última crono que disputó en la Vuelta al País Vasco con una importante infección bucal y pese a todo la ganó, al igual que hizo en la anterior disputada en Castilla-León. Entonces estaba en un buen momento de forma, pero en los primeros días del Giro ha demostrado que sin prepararlo específicamente tiene un nivel que con su gran calidad resulta suficiente para disputar la carrera si el codo no le perjudica.

El día de Menchov

En condiciones normales la etapa de hoy era propicia para los tres líderes del Astana, Contador, Klöden y Leipheimer, mejores especialistas que los italianos. Aunque la crono no es llana y eso les permitirá perder menos tiempo, Di Luca, Ricco, Pellizotti, Simoni, Piepoli y compañía deben ceder terreno con respecto a los especialistas del Astana y a tres rusos como Menchov, Karpets y Petrov, sobre todo con el de Rabobank.

El ganador de la última Vuelta ha demostrado que no ha ido al Giro sólo a preparar el Tour y hoy va a disputar la crono a tope sin ninguna duda porque los grandes corredores siempre disputan las pruebas contrarreloj. En función del tiempo que saque hoy a los escaladores puede aumentar su disposición a exprimirse en las etapas de alta montaña si ve posibilidades de acabar en el podio de Milán.

Porque la conclusión que se puede sacar de los nueve primeros días de carrera es que todos los grandes corredores han acudido al Giro con la intención de hacerlo bien y los tres líderes del Astana, los tres rusos y Savoldelli deben aprovechar las tres cronos que les quedan.

Riccardo Ricco ya anunció en su entrevista a GARA que este invierno ha trabajado con la bicicleta de contrarreloj y al no ser el de hoy un recorrido llano y ser el corredor más en forma de la primera parte de la prueba es de esperar que lo haga mejor que el año pasado.

En lo que se refiere a los vascos, se prevé que muy pocos la disputen. Sólo Juanma Garate opta a un buen puesto en la general pese al tiempo perdido en la primera toma de contacto con la montaña. Los demás piensan más en próximas etapas y por eso no querrán gastar demasiadas energías esta tarde. Por otra parte, Bingen Fernández viajó ayer a París para ser examinada su clavícula rota y se prevé que será operado hoy.