NBA
Manu Ginobili y Tim Duncan dan emoción a la final del Oeste
San Antonio cerró filas en casa para hacerse con el tercer punto de la final de la Conferencia Oeste con Ginobili y Duncan como jugadores estelares mientras que en Los Angeles Lakers la indiferencia y la relajación fueron las principales notas del choque
Izkander FERNÁNDEZ | BILBO
En esta ocasión no se repitió la secuencia del primer partido. No hubo desilusión ni fatalidad. San Antonio Spurs comenzó enchufado, con claridad de ideas y mucho acierto de cara al aro angelino. Y esta vez sí, sirvió de algo. Consiguieron importantes ventajas y supieron mantenerlas hasta el final, al que se llegó con un claro 103-84 para los tejanos. Pese a Kobe Bryant.
Manu Ginobili despertó de su letargo anotador y consiguió 30 puntos saliendo desde el banquillo, mientras que Tim Duncan sumó 22 tantos, capturó 21 rebotes y repartió cinco asistencias para que los Spurs recortasen la ventaja de los Lakers y pusieran la emoción al casillero de la eliminatoria que luce un intrigante 2-1. El cuarto partido se disputará el jueves, también en San Antonio.
Gracias a la victoria, San Antonio Spurs se mantienen imbatidos en su cancha y escapan del peligroso agujero que supone ir perdiendo por 3-0 en una final de Conferencia, una diferencia que no ha salvado ninguna franquicia en toda la historia de la competición.
Pese a que todo el mundo esperaba ver una nueva exhibición de Kobe Bryant, como ya ocurriese en el primer encuentro de la serie, esta vez el jugador de los Lakers no fue capaz de dar la vuelta al marcador, resultando decisiva la ventaja de 20 puntos obtenida por San Antonio. Los Spurs se pusieron por delante con claridad mediado el segundo cuarto y esta vez no hubo vuelta atrás.
Bryant anotó 30 puntos, Pau Gasol 15 y Lamar Odom se arrastró por la cancha con un triste 2 de 11 en tiros de campo pese a que entregó 6 asistencias y recogió 11 rechaces. El escolta de los Lakers reconoció que San Antonio había «defendido sólidamente», pero que su acierto de cara al aro había sido limitado ya que habían fallado «bastantes tiros fáciles».
Otra de las claves del partido, aparte de la buena defensa de los Spurs, fueron los tiros libres, ya que Los Angeles se condenó con un triste 8 de 17 con Bryant pasando una única vez por la línea de personales.
El último cuarto comenzó con una ventaja de doce puntos a favor de los Spurs (69-57). Una buena racha de San Antonio culminada por una canasta de Tony Parker ponía 20 arriba a los de Greg Popovich con ocho minutos por jugar.
Entonces Bryant, intentado emular sus grandes hazañas, se disfrazó de sí mismo y amenazó con aguar la fiesta de la franquicia tejana. La estrella de los Lakers encestó cuatro triples en dos minutos y medio dejando a su equipo a 11 a falta de cinco minutos para jugar.
Pero no era la noche de los Lakers y la buena defensa de los Spurs y una jugada de tres puntos de Duncan dejaban el partido justo donde estaba antes de la irrupción de Bryant. El 97-78 mandó al banco a las estrellas angelinas y Phil Jackson comenzó a pensar en el cuarto partido.
Gasol, criticado
El ala pívot catalán de los Lakers ha pasado a ser el blanco de buena parte de la prensa deportiva más histriónica de la capital californiana. Recientemente, un columnista de la web de una potente cadena estadounidense, aseguró que Pau Gasol «apestaba» y que pese a tener los números «adecuados», no era una estrella «al menos a día de hoy».
El columnista afirmaba que los números de la carrera de Gasol «mienten» y que hay otros jugadores, principalmente estadounidenses y de segunda línea, que «aportan lo mismo a sus equipos». Además, añadió juegos de palabras como Gasoft («Gasuave») y destacó que Gasol es un globo hinchado por los propios Lakers.