Plan interinstitucional para reactivar la economía 2008-2012
Lakua y las diputaciones adelantarán inversiones en infraestructuras
El lehendakari, Juan José Ibarretxe, afirmó que «estamos preparados para inyectar fondos y adelantar inversiones», al presentar el plan con el que el Gobierno de Lakua y las diputaciones de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa quieren reactivar la economía. Dinamizar la inversión pública, coordinar la actuación institucional y adelantar inversiones previstas en todo tipo de infraestructuras son los objetivos del plan cuya concreción en cifras y proyectos pospuso hasta el día 20.
Pablo RUIZ DE ARETXABALETA | GASTEIZ
Ni presupuesto, ni proyectos ni financiación. Toda concreción sobre el plan interinstitucional para hacer frente a la desaceleración económica quedó pospuesta a una nueva presentación que Lakua y las diputaciones llevarán a cabo el próximo día 20 de junio.
Ayer, el lehendakari Juan José Ibarretxe y los diputados generales de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, Xabier Agirre, José Luis Bilbao y Markel Olano, respectivamente, dieron la solemnidad de los grandes proyectos al anuncio de este Plan para la Aceleración Económica y el Empleo, tras reunirse en Gasteiz para fijar los criterios generales con el que quieren reactivar la economía.
Sin embargo, apenas ofrecieron mayor concreción en sus planes que los que ya había adelantado el lehendakari a los empresarios el pasado 29 de mayo. De hecho, fue la patronal la primera en recibir el mensaje de confianza de las instituciones y en tener noticia del plan durante la celebración del Día de la Empresa celebrado por Adegi.
Ibarretxe explicó que Lakua y las diputaciones jugarán un papel «anticíclico», de impulso a la actividad económica en el momento en que se produce la desaceleración y añadió que quieren hacerlo «de forma conjunta y coordinada».
Adelantar la inversión
Dinamizar la inversión pública, coordinar los esfuerzos de las diferentes instituciones y adelantar la inversión de infraestructuras y de proyectos de inversión significativos serán los tres objetivos de este plan.
Lakua y las diputaciones se fijaron seis ejes de actuación para desarrollar infraestructuras en diferentes ámbitos: infraestructuras en comunicaciones y telecomunicaciones, infraestructuras tecnológicas y energéticas; sanitarias, educativas y sociales; culturales y deportivas e hidráulicas y de medio ambiente, además de las actuaciones dedicadas expresamente a la dinamización económica.
El plan abarcará el período 2008-2012, aunque la mayor parte de las inversiones se concentrarán en los tres primeros años, que previsiblemente serán los que acusen en mayor medida la desaceleración económica.
Ibarretxe añadió que estará abierto a actualizaciones anuales y a la inclusión de nuevos proyectos, y que podrá incorporar a otras instituciones, como la administración del Estado español o europea.
Gasto social
Finalmente, definió el plan como «realista», porque «lo que vamos a incorporar son proyectos definidos de forma absolutamente clara en cifras», que se presentarán el próximo 20 de junio. Explicó que algunos de los proyectos incluidos en el plan se encuentran ya en marcha, por lo que se tratará de acelerar su ejecución, mientras que otros serán nuevos. Ibarretxe aseguró que para financiar estas actuaciones «ni nos planteamos la reducción del gasto social. Estamos preparados para la inyección de políticas públicas y también decididos a incrementar el gasto social».
Además, excluyó del mismo plan las políticas de impulso a la industria y las políticas fiscales. Tampoco se incluirá entre las infraestructuras a impulsar, según el lehendakari, la del Tren de Alta Velocidad, que «tiene su propio sistema de gestión y de financiación». Aun así, señaló que muchas otras redes ferroviarias sí estarán recogidas.
Respecto al modo de financiación de estas actuaciones y la posibilidad de recurrir al superávit presupuestario o al endeudamiento tan sólo avanzó que «haremos el máximo acopio de fondos sin comprometer la confianza de los mercados y del mundo en nuestra credibilidad». Las instituciones, dijo, conseguirán los fondos «gestionando con racionalidad».
ELA denunció el pasado lunes que resulta «escandaloso y obsceno» que el Gobierno de Lakua y las tres diputaciones forales hayan logrado en 2007 un superávit de 1.396 millones, cuando la CAV se encuentra «a la cola europea» en gasto de protección social y apostaron por aumentar este gasto para reactivar la economía y crear empleo.
Igualmente, LAB opinó la semana pasada, ante el primer anuncio de este plan, que se trata de «una mera operación de propaganda mediática que trata de vender dos veces la misma mercancía, y se anuncia una serie de medidas que en realidad forman parte de proyectos anteriormente comprometidos por estas instituciones».
«En mejor situación» que otros
En el análisis sobre la situación económica, Ibarretxe reconoció que «estamos en un proceso de desaceleración económica», pero quiso subrayar que «no se trata de una recesión», y recordó que las previsiones de crecimiento del PIB de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa se sitúan por encima de las del Estado español y de la Unión Europea. Lakua prevé un crecimiento del 2,7% para este año, tras haber rebajado ese cálculo cinco décimas respecto al previsto en el mes de febrero.
Ibarretxe quiso destacar que las instituciones van a ejercer «el liderazgo político y socioeconómico» ante la situación económica, y aseguró que «hemos hecho los deberes y por eso tenemos datos de crecimiento económico más altos que el entorno», y atribuyó la mejor situación a una mayor inversión en Innovación y Desarrollo.
De esta forma quiso destacar que «estamos preparados para inyectar fondos y adelantar inversiones», convencido de que «la economía vasca saldrá incluso reforzada». Se mostró satisfecho porque «hemos gestionado bien y por eso es posible dar ese impulso a la economía».
Ibarretxe afirmó que el Tren de Alta Velocidad no estará incluido dentro de las infraestructuras que impulsará el plan, porque «cuenta con su propio sistema de gestión y financiación» aunque sí se invertirá en otras redes ferroviarias.
El lehendakari aseguró que no se recortarán gastos sociales para destinarlos a financiar las infraestructuras incluidas en el plan, porque «estamos preparados para la inyección de políticas públicas y también decididos a incrementar el gasto social».
El presidente del BBVA, Francisco González, cargó ayer sobre las familias la responsabilidad de hacer frente a los problemas económicos sin esperar ayudas públicas. González aseguró que «cada familia tiene que ser realista sobre su situación económica y hacer los deberes» y «no pedir que toda la ayuda venga del Gobierno».
Así respondió el presidente del BBVA, en la clausura de su conferencia en el congreso ExpoManagement 2008, a una pregunta sobre su visión de la actual situación económica y del impacto sobre los hogares.
González, que el año pasado obtuvo unos ingresos de 8,8 millones de euros, consideró que «tendremos que sufrir» el aumento del paro, «hay que pasarlo», pero añadió que espera «que sea de la mejor manera posible» y lamentó que no se pueda evitar.
El presidente de la entidad que en 2007 ganó 6.216 millones de euros, recordó que «ahora es el momento del ajuste de la economía» y de mejorar la productividad, aunque insistió en que eso supone «un cambio de modelo que lleva tiempo». Asimismo, recordó que la economía creció de manera «muy fuerte» durante 12 ó 13 años y en los cinco últimos, «lo hizo muy escorada» al sector inmobiliario.
Aunque González rechaza las ayudas públicas para las familias, el sector financiero sí se está viendo ayudado por continuas intervenciones de entidades como el Banco Central Europeo (BCE) y la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), a través de inyecciones monetarias en los mercados, con el fin de socorrer a los bancos por una falta de liquidez generalizada, fruto de la desconfianza entre ellos surgida con la crisis hipotecaria de Estados Unidos.
Por otro lado, el ministro de Industria, Turismo y Comercio del Gobierno español, Miguel Sebastián, afirmó que desde hace mucho tiempo no se daba una circunstancia económica como la actual, con problemas de liquidez, problemas inmobiliarios y de encarecimiento del petróleo y que las medidas tomadas por el Ejecutivo español «suavizarán» la desaceleración. Sebastián volvió a repasar las medidas que afectan a todos sus departamentos: energético, turismo, telecomunicaciones y industrial. El ministro recordó la frase del ex presidente estadounidense Bill Clinton de que «el pesimismo no crea ningún puesto de trabajo» y dijo que en este momento lo que hay que hacer es poner las medidas para superar la situación actual.
Al igual que Ibarretxe comparó la situación de la CAV con la del Estado español y la UE, el ministro español hizo lo propio al afirmar que el crecimiento español sigue en tasas más altas que la media europea y que el sector exterior español está cambiando hacia un mayor equilibrio.
Recordó que la situación económica está afectando menos a las economías emergentes, y dijo que espera que la OCDE «se vuelva a equivocar» y que no se cumpla su previsión del 0,7 % de crecimiento.
Lakua y las diputaciones no adelantarán una cifra de inversiones hasta el día 20. Para financiarlas no aclararon si recurrirán al endeudamiento y afirmaron que realizarán «el máximo acopio de fondos gestionando con racionalidad».
