Argelia amaneció ayer aturdida tras el doble atentado contra una empresa francesa, que provocó trece muertos y que se registró el domingo cerca de Lakhdaria (al este de Argel), ya que es una evidencia de la pujanza de los grupos armados islamistas tras meses de calma.

«Estoy inquieto por esta vuelta del terrorismo a pesar del despliegue de un importante dispositivo de seguridad en torno a Argel», subraya un técnico superior de telecomunicaciones. «Estos ataques han incrementado la sensación de inseguridad», añade.

«El terrorismo ha vuelto con fuerza, no acabará jamás», destaca, por su parte, un portero de el-Achour, cerca de Argel.

El doble atentado tenía como objetivo a la empresa multinacional francesa de obras públicas Razel, encargada de la reparación del túnel ferroviario de Ammal en Beni-Amrane, que resultó dañado a comienzos de años tras la colisión de un tren de transporte de combustible y una locomotora.

Entre los fallecidos se encuentra Pierre Nowacki, un ingeniero francés de 57 años que fue alcanzado por la onda expansiva de la bomba, colocada por donde iba pasar su vehículo a la salida de la zona de obras. Su chófer argelino también murió.

Media hora más tarde, una segunda bomba estalló contra los integrantes del equipo de emergencias y la escolta del ingeniero francés. Esta bomba provocó ocho muertos entre agentes de seguridad y de protección civil.

Estaba previsto que el cuerpo del ingeniero francés fuera repatriado ayer. Es la segunda ocasión desde setiembre de 2007 que ciudadanos franceses son objetivo de un atentado en Argelia, pero se trata del primer francés muerto en atentado islamista desde 1994.

Entre setiembre de 1993 y 1994, un total de 71 extranjeros, entre ellos 22 franceses, murieron en atentados en Argelia.

Los dos atentados simultáneos del domingo siguen, según especialistas, el modo habitual de actuar de al-Qaeda, que lleva a cabo una maniobra de distracción para atraer a las fuerzas del orden para proceder a continuación a atacar su objetivo principal provocando el mayor número de muertos posible.

Los atentados del domingo aún no han sido reivindicados, pero al igual que los realizados los cinco días precedentes, parecen ser obra de al-Qaeda en el Magreb Islámico.