«Esperábamos que pudiera realizarse este año, pero se tomó la decisión de aplazarlo debido a la preparación de las elecciones presidenciales y legislativas del próximo año», señaló Abdul Rahman Ghafoori, presidente de la oficina estadística central, encargada de la elaboración del que será el primer censo completo en la historia de Afganistán. La realización de este registro demográfico estaba prevista para el próximo mes de agosto, pero finalmente se hará en verano de 2010 para que no coincida con la elaboración del censo electoral y evitar «la confusión en la gente y la politización del censo», aunque también mencionó los «problemas de seguridad» en el sur del país.

La ausencia de recientes datos demográficos completos está dificultando el desarrollo del país, que la pasada semana recibió más de 13 mil millones de euros de la comunidad internacional para su reconstrucción. Este aplazamiento causa un mal efecto en la comunidad internacional, ya que es uno de los dos objetivos prioritarios marcados por la ONU en la Conferencia de Bonn de 2001.

La decisión de aplazar la elaboración del registro, un proyecto que costará más de 40 millones de euros, fue adoptada por el presidente, Hamid Karzai. Su Gobierno prohibió recientemente la publicación de datos parciales del censo para «no incitar a la discriminación».

«Desde 2002, Afganistán ha recibido una importante ayuda internacional, pero las cosas no han cambiado mucho y seguimos teniendo poco acceso al agua y a la electricidad», lamenta Soraya Sobhrang, de la Comisión Independiente de los Derechos Humanos en Afganistán.

«Para llevar adelante los planes de desarrollo que incluyen infraestructuras, tienen que conocer bien a la población y ¿cómo lo van a hacer si no tienen datos estadísticos precisos?», se pregunta.

Afganistán empezó a elaborar en 1979 el censo de su población, pero nunca se terminó el trabajo debido a las continuas guerras. Se considera que la población actual oscila entre los 23 y 33 millones de personas.

Observadores señalaron que el censo podría cuestionar gran cantidad de interpretaciones sobre el peso demográfico de las distintas etnias y trastocar los equilibrios políticos entre provincias. Se considera mayoritarios a los pastunes, seguidos de tayikos, hazaras, uzbekos y otras etnias, pero las bandas son muy amplias. Se estima que los pastunes representan entre un 25 y un 40% de la población.