Un nuevo paro en el campo argentino agudiza la tensión con el Gobierno
La tensión entre el Gobierno de Argentina y las principales asociaciones agropecuarias ha aumentado en las últimas horas después de que el domingo comenzara el cuarto paro en el campo en los últimos tres meses y se convocara para hoy otra concentración de apoyo a la presidenta.
GARA |
El ex mandatario argentino Néstor Kirchner convocó ayer a los argentinos a participar en el acto convocado para hoy en la Plaza de Mayo, en Buenos Aires, en apoyo a la presidenta, Cristina Fernández, en el conflicto que mantiene con las principales entidades agropecuarias, que el domingo iniciaron el cuarto paro de los últimos tres meses contra el alza de los impuestos a la exportaciones de granos mediante el llamado sistema de impuestos móviles.
Kirchner aseguró que este acto es «en defensa del sistema democrático» para «poder convivir pensando diferente sin caer en el autoritarismo agresor» y «en defensa de la pluralidad de ideas» y defendió las retenciones móviles para «defender la mesa de los argentinos», ya que, según dijo, «no es una medida fiscalista sino que tiende a la reconversión distributiva y a la redistribución del ingreso».
Pocas horas antes de la comparecencia del ex presidente, y mientras transportistas y productores rurales mantenían los cortes parciales y totales de carretera en varias provincias del país, dirigentes peronistas y opositores pidieron la suspensión de la concentración de hoy en apoyo a Fernández, a la que expresó su adhesión la Confederación General del Trabajo (CGT), la mayor central sindical.
Los gobernadores peronistas de Chubut y Córdoba consideraron que la prioridad es retomar el diálogo con las asociaciones del campo. Los líderes del peronismo de Santa Fe y Entre Ríos también apostaron por el diálogo. Santa Fe y Córdoba son, junto a Buenos Aires, las más afectadas por las protestas agrarias.
El acto de respaldo a la presidenta coincidirá con una jornada de protesta general impulsada por las organizaciones agropecuarias, que llamaron a la sociedad a expresar su adhesión al sector con el cierre de comercios, movilizaciones y apagones. La CGT, por su parte, dispuso el cese de actividades a partir del mediodía para facilitar la asistencia de los trabajadores a la Plaza de Mayo y reclamar «el fin de esta campaña desestabilizadora llevada adelante a través de cortes de ruta que afectan a la mayoría del pueblo argentino, especialmente a los más necesitados».
El lunes por la noche, varios miles de argentinos salieron a las calles de las principales ciudades con cacerolas, ollas y sartenes para mostrar su rechazo al Gobierno y pedir diálogo para solucionar este largo conflicto que está causando pérdidas millonarias y problemas en el abastecimiento de alimentos y combustible, además de la caída del turismo.
La principal central sindical del país, la CGT, ha llamado al cese de las actividades a partir de este mediodía para facilitar la asistencia de los trabajadores al acto de hoy en apoyo al Gobierno y a la presidente, Cristina Fernández.