En la plaza de Astigarraga, a partir del mediodía, se podrá disfrutar hoy de distintos deportes adaptados: ciclismo, boccia, slalom, baloncesto... Cada canasta será un paso por la normalización y la concienciación sobre las dificultades que tienen que afrontar diariamente las personas con discapacidad.

Los protagonistas de la fiesta son menores afectados de diversidad funcional, de ceguera, autismo, espina bífida, enfermedad mental y discapacidad intelectual. Niños y niñas que a lo largo de todo el año han encontrado en la actividad deportiva un modo de diversión, mejora física y socialización, dentro de un programa llevado a cabo por la Federación de Deporte Adaptado de Gipuzkoa.

Es su fiesta deportiva, y podrán compartirla en igualdad con los demás niños y mayores. Entre todos, constituirán un campus en el que la diversidad funcional será enriquecedora.

Según explicó el presidente de la Federación, Mikel Izagirre, en la rueda de prensa de ayer, estos niños no encuentran atención alguna en el campo de la actividad físico-deportiva en sus centros escolares. No participan en los juegos junto con sus amigos, quizás por su discapacidad, pero también por la falta de recursos de las instituciones que tienen que ofrecer herramientas a los colegios. Los participantes de la Federación piensan que pueden y deben desarrollar la práctica deportiva, y el día de mañana algunos de ellos, con constancia y disciplina, ser grandes campeones.

«Nosotros estamos poniendo un parche, porque lo ideal es la integración; no hacer grupos de trabajo con niños discapacitados. Lo ideal es que participen con los demás niños en todas las actividades, tanto lúdicas, como escolares, deportivas o extraescolares. La sociedad debe ir cambiando, tenemos que mentalizarnos poco a poco, y una de las labores de la Federación es ésa. Hemos estado presentes en más de veinte centros escolares, con más de 1.600 niños, a los que les hemos mostrado cómo es la vida de un niño discapacitado, de una persona en una silla de ruedas o que practica una determinada actividad deportiva. Queremos que la gente, desde su juventud, tenga como compañeras a otras personas diferentes y que las contemplen con la mayor normalidad posible», expresó Izagirre.

El tercer Campus de Verano de Deporte Adaptado girará en torno a la enfermedad mental, «una discapacidad poco atendida y comprendida en esta sociedad». Desde la Federación quieren resaltar la importancia del deporte para los jóvenes afectados por esta discapacidad y, para ello, ofrecerán una charla sobre la enfermedad mental y el deporte, y otra sobre las posibilidades laborales y la discapacidad. La de hoy será una gran fiesta en la que el baloncesto, el ciclismo, la boccia, el slalom, practicados por niños y mayores, acercarán el deporte adaptado a la sociedad.

El diputado foral de Deportes, Iñaki Galdos, se mostró satisfecho porque poco a poco vamos teniendo noticias de actividades de impulso. Felicitó a la Federación por «la gran labor que está haciendo», al tiempo que anunció que están trabajando para hacer realidad un proyecto de un gran centro de deporte adaptado en Donostia, «pionero en el Estado y también en Europa».