El circuito oficial vasco de carreras de montaña visitaba por primera vez la prueba de Aramotz. En su segunda edición, los organizadores, el grupo de corredores de montaña Brinean, lo tenía todo más que atado. Sólo faltaba que el tiempo acompañase, pero esta vez la lluvia también quiso erigirse en protagonista. El número de inscripciones llegaba hasta los 230, pero las lluvias caídas desde el sábado quitaron las ganas a unos cuantos, y finalmente en la línea de salida se presentaron unos 180 corredores.

Por delante tenían uno de los recorridos más técnicos, con 26,5 kilómetros de distancia y unos 1.600 metros de desnivel positivo por superar. Echando un vistazo a las previsiones del tiempo, los organizadores de Brinean (Amorebieta-Etxano) marcaron el recorrido a conciencia; a pesar de todo, hubo algún que otro despistado. La presencia de la lluvia (y en ocasiones, de la niebla) fue una pena, sobre todo si tenemos en cuenta que el recorrido se adentra en el Parque Natural de Urkiola, con el Leungane (1.006 m) como cota más alta.

Lluvia y más lluvia, tanto la víspera de la carrera como el domingo. Barro y más barro en muchos tramos, lodazal en términos generales. Muchos corredores y organizadores definieron la carrera como odisea. Los más asiduos a este tipo de pruebas «disfrutaron» en general con este recorrido tan técnico y, al mismo tiempo, casi impracticable. Los demás sufrieron de lo lindo, y es que muchos de ellos apenas conoce la montaña.

En categoría femenina, toma y daca entre Nerea Amilibia y Oihana Kortazar. Esta última tuvo un par de despistes en el recorrido (de nuevo recordamos que estaba marcado a conciencia) y casi dejó en bandeja el triunfo a Amilibia, quien llegaba a la meta en solitario con un tiempo de 3:02:08; rebajaba en 10 minutos el crono del año pasado. A tan sólo 1 minuto y 36 segundos llegaba Kortazar, y el tercer puesto era para Jaione Sasieta con un crono de 3:13:13.

La carrera de los chicos, como se esperaba, estuvo protagonizada por la supremacía de Fernando Etxegarai. El de Bera lo tenía todo controlado ya que unos días antes había realizado todo el recorrido. Desde el inicio de la prueba se puso en cabeza, y así llegó a la meta de Zornotza. En mente tenía superar el récord del año pasado, el de Fernando Zuloaga con un tiempo de 2:32:30. Y ya al paso de Leungane lo tenía todo más que atado. A pesar de un par de caídas con golpes en la cara y en la rodilla, Etxegarai llegaba a la meta con un crono de 2:29:13. Enekoitz Aizpuru fue segundo, a casi dos minutos del vencedor; y Zigor Iturrieta, tercero, a ocho minutos.

El primer veterano masculino fue Ander Unzurrunzaga (quinto en la general), segundo Joxe Luis Albizuri y tercero Lake Oiarbide.

Aprovechando su participación en la prueba de Kolitza del sábado, a punto estuvo de participar el gran Kilian Jornet, pero el catalán llegó media hora tarde a la línea de salida y desistió.

Jornet ganó en Andorra

El corredor catalán no tuvo ningún problema para llegar puntual a la tercera cita de la Copa del Mundo que se disputó en Ordino (Andorra) el 29 de junio.

En total, los corredores tenían por delante un exigente recorrido de 34 kilómetros y 2.850 metros de desnivel. En la categoría masculina, la prueba fue dominada por Agustí Roc y Kilian Jornet. Ambos se mantuvieron siempre en la cabeza, pero, una vez superado el ecuador de la carrera, Jornet decidió ir en solitario y llegó primero a la meta. Roc fue segundo a 5:34 del ganador, y el tercer puesto del podio se lo llevó el segoviano Raúl García a 5:54. El mejor clasificado de la selección vasca fue Joxe Felipe Larrazabal con el octavo puesto.

En féminas, la portuguesa y actual líder de la Copa del Mundo Rosa Madureira aprovechó el pinchazo en los últimos kilómetros de la andorrana Stephanie Jiménez para llevarse el triunfo final. Primer puesto para Madureira, seguida a 51 segundos de Jiménez y a 23:25 de la venezolana Cruz Salazar. Alizia Olazabal fue cuarta y Alizia Romero séptima de 16 competidoras.