CRíTICA teatro, Kalealdia 08
Cuando lo normal es una utopía
Carlos GIL
Los franceses de Les Apostropheés realizan en su «Passage Désemboîté» un despliegue de matices, de singulares números donde se premia lo simple, es decir el contacto directo con los espectadores, en un itinerario que utiliza espacios de uso cotidiano de la ciudad que se transforman en un decorado adecuado para al ejecución de sus bien preparados y perfectamente ejecutados gags, mostrando una depurada técnica que siempre se utiliza para humanizar a cada uno de sus personajes y que, en su conjunto, nos deparan una larga hora divertida y agradable, comprendiendo que para ellos lo más difícil es siempre lo que parece lo normal. La jornada se completó con la presencia del la pareja de actores-malabaristas De bote en bote y su muy traqueteado «Ensillados», el pasacalles de Vagalume, «A cuadros», estrenada hace dos años en Leioa, y dos obras que vimos hace muy poco en la Umore Azoka: «Ganso», a cargo de Renato, el divertido unipersonal de Gorka Zero, y «Tocata y fuga en furenol», de Teatro Zanguango, un sólido trabajo actoral y espacial.