Trichet no ve contradictorio subir los tipos e impulsar el crecimiento
Una semana después de haber subido el precio del dinero al 4,25%, el presidente del Banco Central Europeo, Jean Claude Trichet, justificó la política del BCE afirmando que no hay contradicción entre el aumento de los tipos de interés para controlar la inflación y el impulso al crecimiento económico. Tanto Trichet como el Banco de España creen que la inflación seguirá en niveles altos.
GARA |
El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, aseguró ayer que «no hay contradicción» entre garantizar la estabilidad de los precios en la eurozona e impulsar el crecimiento y la creación de empleo.
En una comparecencia ante el Parlamento Europeo, Trichet defendió así la labor del BCE con los tipos de interés frente a las críticas sobre que se concentra sólo en la vigilancia de la inflación, sin prestar atención a la evolución de la actividad y del mercado laboral.
Recalcó que, mediante la aplicación de una política monetaria centrada en lograr la estabilidad de precios a medio y largo plazo y «gracias también a su credibilidad», el BCE «sienta las bases» para un crecimiento sostenido y vigoroso en la creación de empleo.
Trichet reconoció que, debido principalmente al encarecimiento de las materias primas, la inflación en la zona euro se encuentra en un nivel «inquietante» y vaticinó que seguirá «durante cierto tiempo» por encima del objetivo del 2%.
Según los primeros cálculos de Eurostat, la oficina estadística comunitaria, la inflación media en los países del euro marcó en junio un nuevo récord, al llegar al 4%.
Según Trichet, en los últimos meses, además, han aumentado los riesgos al alza por posibles subidas adicionales de las materias primas o aumentos no previstos de los impuestos indirectos y precios administrativos.
El banquero insistió en recomendar la moderación de los salarios al afirmar que existe el «peligro» de que se desencadene una espiral inflacionista, si se traslada la subida de la inflación a otros precios y salarios» y llegó a vaticinar aumento del paro si lo salarios se equiparan a la subida de precios.
Recordó que la semana pasada el BCE ya adoptó una subida del precio del dinero, hasta el 4,25%, y recalcó que «seguirá en el futuro vigilando muy de cerca la evolución de los precios».
Precio del petróleo
Preguntado por los eurodiputados sobre las causas que están detrás de la escalada del petróleo, Trichet aludió a la fuerte demanda de las economías emergentes, así como a la rigidez de la oferta -«los cárteles no son buenos», dijo, en referencia a la OPEP- y a la falta de inversiones en exploración e infraestructuras. Y, aunque también reconoció que se ha producido una «reorientación de las inversiones internacionales hacia las materias primas», evitó denominarla «especulación».
La opinión de Trichet coincidió con la del gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, quien consideró ayer que en el futuro no volverán a darse tasas de inflación tan «benignas» como las de los últimos años, y defendió una política monetaria que actúe «con firmeza» para ayudar a estabilizar los precios. En este sentido, advirtió de que la persistencia de tasas de inflación elevadas durante un periodo prolongado puede producir efectos de segunda ronda y «poner en duda la capacidad de los bancos centrales para alcanzar sus objetivos». Fernández Ordóñez advirtió de que «es difícil pensar» que vuelvan a darse unas condiciones financieras «tan holgadas» como las del último lustro. No obstante consideró que aunque el endurecimiento del crédito tenga un efecto «moderador» sobre la economía en la actualidad, ayudará a fortalecer el sistema financiero y a hacer más «sostenible» el próximo ciclo económico expansivo. Además, auguró que la actual fase de bajo crecimiento «podría prolongarse más de lo esperado».
El presidente del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, auguró que los tipos de interés seguirán altos al opinar que «es difícil pensar que vuelvan a darse unas condiciones financieras tan holgadas» como las del último lustro.
El Servicio de Estudios Económicos del BBVA afirmó que la economía española tendrá «crecimiento cero» en el segundo trimestre del año -frente al 0,3% que registró entre enero y marzo-, mientras que la tasa interanual se situará «holgadamente» por debajo del 2%.
La evolución del Producto Interior Bruto (PIB) de la eurozona sigue reflejando la desaceleración, ya que creció el 2,1% en el primer trimestre de 2008 respecto a igual periodo del año anterior, y en la UE, el avance fue del 2,3%. Eurostat, la oficina estadística comunitaria, ha revisado a la baja sus cálculos previos de junio, cuando cifró el crecimiento de los países del euro en el 2,2% y el 2,5% en toda la Unión. En relación al último trimestre de 2007, el aumento del PIB fue del 0,7% en las dos zonas (Eurostat calculó en junio que había sido del 0,8%). En los tres últimos meses del año anterior, el crecimiento había sido menor, del 0,4% en el área de la moneda única y del 0,5% en los Veintisiete. Eslovenia registró el mayor crecimiento trimestral, del 2,2%, mientras en Dinamarca bajó el 0,6%, en Estonia, el 0,5%, y en Irlanda y Portugal, el 0,2%. En términos interanuales, sólo retrocede el PIB en Dinamarca, el 0,6%, y en Irlanda, el 1,5%.
Por su parte, el vicepresidente segundo del Gobierno español, Pedro Solbes, afirmó ayer que no debe preocupar si se habla o no de crisis en la economía española, sino los datos, que, en su opinión, han sido siempre «transparentes».
