Ofensiva contra la izquierda abertzale
Madrid intensifica su ofensiva contra la izquierda abertzale con otras treinta imputaciones
Más de treinta militantes independentistas deberán comparecer, a comienzos de setiembre, ante el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón. Lo harán en calidad de imputados en el proceso abierto contra EHAK por el magistrado, quien ya en febrero de este año dictó un auto por el que suspendía por tres años las actividades de este partido y ordenaba la clausura de sus sedes. Uno de los principales efectos de la reunión mantenida ayer en La Moncloa por José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy fue la vuelta al espíritu del «Pacto Antiterrorista» de 2000, cuya receta básica, que ya venía aplicando el Gobierno del PSOE, es ahondar en la estrategia represiva contra el independentismo vasco. Tampoco faltaron las críticas comunes a la Ley de Consulta.
Anjel ORDÓÑEZ | BILBO
«Declaración abierta de guerra». Así calificaron ayer Idoia Ibero y Tasio Erkizia la escalada en la ofensiva judicial contra la izquierda abertzale que supone la citación como imputados, vía telegrama, a más de una treintena de personas «estrechamente vinculadas» a EHAK. «Por desgracia -destacó Erkizia en una comparecencia en Bilbo-, bien sabemos dónde terminan la mayoría de las personas que acuden a esas citaciones: en Alcalá o en Soto del Real».
El histórico militante abertzale enmarcó las citaciones en «la ofensiva y cruzada represiva contra la izquierda abertzale en la que está inmerso y con la que se ha obsesionado el PSOE». En esta ofensiva incluyó también el proceso contra ANV y EHAK que se sigue en el Tribunal Supremo, que, en opinión de Erkizia, terminará en ilegalización: «Los jueces únicamente pondrán el celofán jurídico; la decisión hace tiempo que la tomó el PSOE».
Otro de los frentes de la ofensiva judicial tiene como objetivo el movimiento pro amnistía. «La Audiencia Nacional hará pública en breve una sentencia sobre la que, por desgracia, nos tememos lo peor: largos años de cárcel por defender la solidaridad con los presos y refugiados políticos.
Asimismo, en setiembre comenzará, probablemente, el juicio en la Audiencia Nacional contra Udalbiltza, «primera institución nacional que tanta ilusión creó en Euskal Herria y que sufrió el boicot del sector españolista liderado por Azkuna».
Erkizia añadió que «aunque el PSOE ha decidido acabar con la izquierda abertzale y con el independentismo en su conjunto a través del GAL jurídico, va a volver a fracasar. Ilegalizan ideas y proyectos, y su ministro Rubalcaba quiere ver en la cárcel a quienes las defendemos; pero Rubalcaba debería saber que ya en 1982 Felipe González fracasó cuando creó el GAL con el objetivo de hacer desaparecer a la izquierda abertzale y que Zapatero volverá a fracasar si elige el mismo camino de represión para solucionar un problema político de hondas raíces en Euskal Herria».
El veterano militante independentista abundó en que el PSOE «utiliza una receta del pasado, por desgracia muy conocida por los abertzales: la represión política, policial y judicial». En esas coordenadas situó los arrestos de nueve vascos el lunes por orden de Garzón.
Añadió Erkizia que «el PSOE ha hecho una apuesta clara por alargar el conflicto ofreciendo a este pueblo como única salida o renunciar a nuestros derechos como nación, o represión, represión y más represión».
Reunión en Madrid
La reunión celebrada ayer en Madrid entre el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, no está al margen del escenario que dibujaron en Bilbo los militantes abertzales. «Digan lo que digan, uno de los temas centrales de la reunión es la estrategia a seguir contra el independentismo vasco; y plantearán un pacto de Estado al estilo del que suscribieron en 2000», dijo Erkizia, quien añadió que «lo más triste es que para ese pacto tienen un colaborador entusiasta», en referencia al PNV.
En este sentido, el militante bilbaino aseguró que «a pesar del aparente enfrentamiento entre los gobiernos de Madrid y Gasteiz sobre la consulta de Ibarretxe, es evidente que el partido de Urkullu le ofrece al PSOE un cheque en blanco y alfombra roja para actuar contra la izquierda abertzale». Muestra de ello, en opinión de Erkizia, son las «fracasadas» mociones contra ediles abertzales en los ayuntamientos y la «saña» con la que actuó la Ertzaintza en el homenaje a Joxe Mari Sagardui, Gatza, en Zornotza.
Ante los numerosos medios de comunicación que asistieron a la convocatoria de los militantes abertzales, Erkizia lanzó estas preguntas: «¿Por qué esta obsesión? ¿Por qué esta caza de brujas? ¿Por qué la caza del abertzale? La explicación es sencilla: en esta coyuntura política en que la mayoría política apuesta por un cambio en profundidad, y por un nuevo marco jurídico y político, la izquierda abertzale es motor impulsor fundamental del cambio y tiene gasolina para un largo recorrido hacia la transición con un proyecto político factible, posible y sencillo: la Propuesta de Marco Democrático».
A pesar de la presión denunciada, Erkizia manifestó con energía que «no conseguirán alejarnos de los objetivos que nos hemos marcado; las posibilidades de lograr un objetivo en paz son reales y la izquierda abertzale apuesta por ellas».
Esas posibilidades pasan por una transición política definitiva en Euskal Herria, habida cuenta de que «treinta años de autonomismo no han permitido solucionar el conflicto ni desarrollarnos como pueblo; Estatuto y Amejoramiento han dejado en evidencia que no son instrumentos válidos y que si algo han conseguido es la supervivencia de los estamentos franquistas como el Ejército, la Policía, los jueces, muchos medios de comunicación... El PNV los vendió como un paso hacia la independencia, pero la historia ha dejado a cada uno en su sitio. En este momento no hay más que dos alternativas: integrarnos en España desapareciendo como pueblo o caminar hacia la plena soberanía a través de un escenario que reconozca los derechos individuales y colectivos de todos los vascos. Ésta es nuestra prioridad y nuestro compromiso».