«Nos pareció una buena idea la camiseta como formato, ya que es un elemento que pertenece, tanto a la vida cotidiana, por su utilidad, junto a lo que puede tener de moda, y la elegimos para intervenir». Así se expresan las mexicanas Alessa Esteban y Ursula Rivera, comisarias, junto a Sergio Solís, de la exposición.

El arranque tendrá lugar hoy, a partir de las 20.00, en la sala de exposiciones de Bilbao Arte, en Urazurrutia 32, con una coreografía multidisciplinaria, un evento visual y de performance. Inicialmente, bajo la dirección de Solís, actor y director de teatro, la puesta en escena iba a adoptar un formato de pasarela para generar una especie de evento visual, «con un toque teatral, alejándose así de una pasarela de moda tradicional».

El planteamiento inicial ha cambiado finalmente y la performance incluirá esculturas vivas con camisetas, música y a la proyección de algunos de los vídeos que recogen el proceso creativo de algunos de los 36 artistas que participan en esta atractiva experiencia.

De México a Austria

«Vamos a mover el trabajo con otros artistas y vamos a desarrollar proyectos juntos», es lo que pensaron Alessa y Ursula. Tras finalizar sus estudios universitarios en México, Alessa se trasladó a Viena para complementarlos. Fue allí donde surgió la idea. «Conocíamos a artistas mexicanos, austriacos, alemanes. Llamé a mis amigos hace aproximadamente un año y presentamos el proyecto aquí, en Bilbao». El proyecto fue elegido y, desde ese momento, la Fundación Bilbao Arte está apoyando a este grupo de jóvenes artistas procedentes de distintos puntos del mundo.

«A partir del formato camiseta, cada artista, con su forma de trabajar, ha ido proyectando su trabajo. Nos damos cita diseñadores, actores, artistas conceptuales o gente que se dedica al vídeo». Durante los preparativos de la muestra, en la tarde de ayer, la sala de exposiciones ya presentaba un llamativo aspecto. «Ha habido un artista que salió de caza y disparó sobre una camiseta que le salió al paso», detallaron las comisarias de ``T-shart fashion show''.

Fabián-Benjamin Rainer, uno de los artistas intervinientes, presenta una camistea manchada con su propia sangre durante su trabajo privado, una circunstancia de tradición en ambientes culturales austriacos, según explica Alessa Esteban. Hay también camisetas con restos de bebida alcohólica, en una intervención desarrollada durante una noche de copas, o, por continuar con la descripción de las intervenciones, también se muestra la indicación top, junto a una flecha, del creador Thomas Stadler, a modo de muestra de cómo vestirse la prenda.

Ajuste de cuentas

Humberto Duque enseña historias muy detallistas en sus soportes, mientras que Ane San Miguel deja ver «su convicción feminista en su obra». Llama mucho la atención el trabajo del mexicano Damián Meneses, con sus impresiones sobre el algodón de una primera página del diario ``La Prensa'', con primeros planos reales de cabezas humanas cortadas en el contexto de un ajuste de cuentas entre narcotraficantes.

En definitiva, las camisetas de autor de esta muestra reflejan la línea de trabajo de cada artista invitado, «intentando así emplear materiales perdurables en su intervención para poder usarse cotidianamente» y, es que uno de los objetivos de la entidad que promueve el proyecto, ArTwisted Projects, con este evento, es crear incentivos para generar nuevos coleccionistas y consumidores de piezas únicas, distintivas y de autor por medio de la moda.