La OTAN apoya a Georgia, pero no quiere un enfrentamiento con Rusia
La OTAN mostró su malestar con Rusia por su presencia en Georgia, pero no quiso provocar la ira de Moscú, por lo que la única medida concreta que adoptó fue suspender una reunión conjunta. En cualquier caso, Moscú acusó a la OTAN de tener «una actitud antirrusa» y de proteger a Saakachvili y al «régimen criminal» de Tbilissi. «Habrá consecuencias», advirtió el ministro de Exteriores, Sergei Lavrov.GARA |
Los ministros de Asuntos Exteriores de la OTAN, reunidos ayer en Bruselas, se mostraron determinados a apoyar a Georgia y a reclamar a Rusia a que complete la retirada de sus tropas, aunque se mostraron cautos a la hora de tomar medidas contra Moscú.
«Hemos decidido que no podemos seguir como si no hubiera pasado nada», destacó el secretario general de la OTAN, Jaad de Hoop Scheffer.
Los 26 estados miembros de la Alianza instaron a Moscú a «demostrar, tanto con palabras como con hechos, que cumple su palabra y los principios con los que hemos fundado nuestra relación».
De Hoop Scheffer destacó que la OTAN no había percibido «ningún signo de retirada rusa de Georgia» y denunció que el presidente ruso, Dimitri Medvedev, no ha cumplido con lo establecido en el acuerdo de alto el fuego suscrito a instancia de Nicolas Sarkozy.
«En estos momentos debe actuar Rusia, no la OTAN, volviendo a las posiciones que ocupaba el 6 de agosto», antes de la ofensiva georgiana contra Osetia del Sur.
En Moscú, en cambio, fue el Estado Mayor ruso quien acusó a las tropas georgianas de no haber vuelto a las posiciones que ocupaban antes de la ofensiva. «A pesar de que Saakachvili firmó el acuerdo de seis puntos y aceptó la vuelta de las fuerzas georgianas a sus lugares de acantonamiento permanente, no ha cumplido su palabra», declaró el general Anatoli Nogovitsin, jefe adjunto del Estado Mayor ruso.
Junto a ello, el documento de alto el fuego autoriza a los rusos mantener tropas en territorio georgiana, cerca de la frontera con Osetia del Sur y sin ocupar poblaciones importantes.
La única medida concreta que adoptó la OTAN contra Rusia fue suspender las reuniones del Consejo OTAN-Rusia, ya que «en estas condiciones, no se pueden organizar sesiones», según De Hoop Scheffer. Sin embargo, se decidió mantener vigente este Consejo.
«No vamos a cortar todos los contactos. Deben volver a sus posiciones del 6 de agosto y, a continuación, estaremos abiertos a todo. No cerramos la puerta al diálogo con Rusia», añadió De Hoop Scheffer.
La secretaria de Estado de EEUU, Condoleezza Rice, por su parte, destacó que Washington «no quiere aislar a Rusia, pero su comportamiento en esta crisis le ha dejado fuera de los principios de cooperación en el seno de la comunidad de naciones».
Rusia respondió suspendiendo su participación en las maniobras conjuntas con la OTAN previstas en el mar Báltico y advirtió de que deja sin efecto el permiso para que la fragata estadounidense USS Ford fondee en el puerto de Petropavlovsk-Kamchatski -en el Pacífico ruso- del 5 al 9 de setiembre, tal y como estaba previsto, según dio a conocer el portavoz de la Marina, Igor Digalo.
En el ámbito político, el ministro de Exteriores, Sergei Lavrov, advirtió de que la decisión de la OTAN «tendrá consecuencias» .
Lavrov consideró que la declaración de la OTAN «no es objetiva y ha tomado partido por una de las partes», al tiempo que subrayó que «ha puesto bajo su protección a Saakachvili y al régimen criminal de Tbilissi», en lo que calificó de decisión «antirrusa».
El general Nogovitsin destacó que Rusia acelerará la retirada de sus tropas a partir del viernes. «Estamos cumpliendo con las obligaciones que asumimos. Lo haremos al tirmo dicta la situación en la zona del conflicto», señaló.
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Las tropas rusas y georgianas intercambiaron prisioneros ayer como «gesto de buena voluntad» en una posición a 45 kilómetros de Tbilissi en la que había soldados de los dos países.
La Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) prepara, a falta de la luz verde de Tbilissi, el envío de 20 observadores militares a Georgia. En los próximos días, se enviarán 80 más.
Las autoridades de Georgia han bloqueado el acceso a casi la totalidad de las cadenas de noticias y páginas web rusas desde que se inició el conflicto armado, con el objetivo de «evitar que asustaran a los ciudadanos georgianos y que éstos viesen propaganda rusa».
«Personas de las agencias de seguridad me pidieron que bloquease los sitios web rusos», aseguró Mamia Sanadiradze, fundador y director ejecutivo de Caucasus Online, la compañía proveedora de servicios de internet más grande de Georgia. «Nos hemos esforzado en hacer frente a la desinformación», señaló Sanadiradze, quien añadió que esperaba poder desbloquear esos sitios «cuando la guerra haya terminado».
En noviembre del año pasado, la principal cadena de televisión que defendía las tesis de la oposición a Saakachvili fue cerrada por el Ministerio del Interior, por lo que el Gobierno georgiano recibió críticas de colectivos de defensa de los derechos humanos.
El director del departamento analítico del Ministerio del Interior, Shota Utiashvili, defendió la medida, destacando que «Rusia no tiene medios de comunicación, sólo emiten propaganda».
