Hoy es su día, aunque uno podría pensar que lo son todos. Las konparsas se aprestan para celebrar este sábado sus comidas todos a una, cada cual en su txosna, y para enfrentarse en sus tradicionales competiciones de deporte rural, aunque esta vez aseguran desde la organización que no se harán tan pesadas. Pero antes, a mediodía, ofrecerán en el Arenal una cata de vino, al olor del marmitako del certamen gastronómico.

Pero eso será hoy, porque ayer festejaron su día dedicado al agua, o mejor, a los juegos de agua, y que en la Aste nagusia del año pasado se suspendieron, precisamente, por el agua, pero el de la lluvia. Esta vez, las traineras y zodiak pudieron echarse al agua en Uribitarte y competir por ser los más rápidos dando paladas con poca coordinación o avanzando hasta el otro lado de la Ría y encestar un balón, haciéndolo en el menor tiempo posible.

Éxito del cross popular

El otro acto de ayer que cada año gana relevancia es el cross popular en el Arenal, para pequeños y mayores. Numeroso público acudió, además, a seguir esta prueba.

La edición de ayer no fue menos exitosa que las anteriores y se inscribieron en las diferentes categorías nada menos que 1.356 corredores, aunque viendo después a los participantes en la categoría senior galopando desde el Arenal haste el Guggenheim, parecían muchos más.

En la categoría de menores de 12 años el primero en cubrir los 700 metros de distancia fue Jon Ander Etura Romero, de Barakaldo, seguido de Iker Urritxa, de Bilbo, y de Nerea Anasagasti, de La Arboleda.

En la categoría de 12 a 17 años, el triunfo fue para Youssef El Garnaoui, al que siguieron a distancia Ugaitz Pérez Jauregibeitia y Youssef Ait.