Un helicóptero del Ejército de Líbano fue abatido ayer cerca de la frontera que éste país comparte con Israel. El ataque, cuya autoría aún no ha sido reivindicada, provocó la muerte del piloto, que estaba realizando «maniobras» al sur del país. Una «fuente cercana a los servicios de seguridad libaneses» aseguró a Efe que «fueron miembros de la milicia chií Hizbulá quienes abrieron fuego». Sin embargo, el secretario general del Consejo Superior Chií negó este extremo y acusó a agentes israelíes de ser los autores del ataque.