Las calles de Iruñea se tiñeron ayer de ikurriñas, banderas de Nafarroa y emblemas contra la tortura y en favor de la amnistía para los presos políticos vascos. Unas 1.500 personas se manifestaron ayer por la tarde en la capital navarra para exigir «el fin del estado de excepción y la falta de democracia que padece Euskal Herria», así como para mostrar su apoyo a los últimos detenidos en la operación policial llevada a cabo en Nafarroa recientemente.

Así, la marcha partió minutos después de las 17.00 bajo el lema «Stop estado de excepción. Demokrazia Nafarroarentzat, Euskal Herriarentzat». Lo hizo desde la antigua estación de autobuses y estuvo vigilada en todo momento por un amplio despliegue policial. Entre los portadores de la pancarta principal se encontraban entre otros el compañero de la encarcelada Maitane Intxaurraga, la concejala de Iruñea Mariné Pueyo y el representante del movimiento pro-amnistía Josu Esparza.

Tras recorrer las principales arterias de la ciudad coreando consignas en favor de la amnistía para los presos políticos vascos y la independencia de Euskal Herria, la manifestación concluyó en la Plaza de Castillo, donde Mariné Pueyo y Iosu Esparza leyeron sendos comunicados desde el quiosco. En primer lugar, quisieron mandar «un fuerte abrazo a todos los represaliados políticos vascos», y en especial, «a los últimos ciudadanos navarros detenidos y encarcelados».

Pueyo denunció que «ésa es la receta política que aplican tanto el PSOE como el PP».

Asimismo, recordando el caso del joven Alberto López Iborra, que estuvo desaparecido durante cinco días tras ser atropellado por la Guardia Civil y hospitalizado, Esparza equiparó la manera de actuar del Estado español con el proceder de los GAL en la década de los ochenta.

«Exactamente igual que entonces, y con el PSOE en el Gobierno, hoy en día se detiene, secuestra y tortura a ciudadanos vascos, con la gran diferencia de que ahora dicen hacerlo de manera democrática, amparándose en la legalidad».

En esa línea, remarcó que «si en eso consiste la democracia, nosotros nunca nos consideraremos demócratas».