Primera derrota de la temporada
Se deja la imbatibilidad en Vallecas víctima de sus propios errores
A pesar de que dio la cara ante el Rayo Vallecano, el equipo gasteiztarra no pudo superar el resbalón de Bernardo en el minuto 26 ni el fallo colectivo que permitió a Diamé marcar el 2-1 justo un minuto después de que Javi Guerra empatara a centro de Igor Martínez
Jon ORMAZABAL | GASTEIZ
El Deportivo Alavés recuperó ayer sus peores vicios en Vallecas y cosechó la primera derrota de la temporada por culpa de sus propios errores en defensa. Sin ser para nada inferior a su rival, el equipo gasteiztarra pagó caro el fallo de Bernardo en la jugada del primer gol en el minuto 26 y echó por la borda su buena segunda parte al encajar el segundo tanto en otro fallo defensivo al minuto siguiente de haber obtenido el empate por parte de Javi Guerra.
Le costó al Alavés acoplarse a las reducidas dimensiones del campo vallecano y al juego directo de los locales, ya que sus jugadores de más toque como Emilio o Moreno apenas tocaban el balón y no colaboraban a tapar las subidas de los laterales del Rayo.
No obstante, tuvo que mediar un error de Bernardo a la hora de despejar un balón colgado a su área para que el equipo de Pepe Mel se adelantara en el marcador. El portero extremeño resbaló y tras un mal remate de Jofre el balón le quedó plácido a Míchel, que marcó el 1-0 sin ninguna oposición.
Le costó al Alavés recuperarse del mazazo, pero antes del descanso Javi Guerra tuvo en su pie izquierdo el empate en un balón que envió al poste. Eso sí, el Rayo también pudo aumentar la ventaja en otro fallo de coordinación de César con Bernardo.
Acertó Salmerón con sus cambios en la segunda parte y el Alavés incrementó mucho sus prestaciones. La entrada de Cuevas y, sobre todo Igor, acoplaron mucho mejor al equipo al cuerpo a cuerpo propuesto por el Rayo y el dominio se acrecentó.
Empate baldío
El equipo de Pepe Mel lo confió todo a su defensa y, aunque las opciones albiazules no fueron abundantes, sí que fueron lo suficientemente claras para pensar en un empate que llegó en el minuto 75 por parte de Javi Guerra. El malagueño combinó perfectamente con Igor y remató el centro del gasteiztarra, convirtiendo su primer tanto con la camiseta albiazul.
Sin embargo, todo el esfuerzo resultó baldío, ya que los babazorros no fueron capaces de aguantar el empate ni durante un minuto. Pese a que el equipo está totalmente renovado, los albiazules cometieron otro error de concentración de esos que tan caros resultaron la temporada pasada a domicilio y Diamé, completamente solo, volvió a adelantar a los suyos.
Remontar por segunda vez a esas alturas del partido parecía imposible, pero Igor Martínez tuvo esa posibilidad a su alcance en un remate que se perdió por muy poco.
