CRíTICA cine
«Che. El argentino»
Mikel INTXAUSTI
Steven Soderbergh es un fotógrafo, no un pintor. Su idea de retratista se acerca más a la del reportero que recoge una instantánea fugaz, un determinado momento de la vida de un personaje histórico, pero sin llegar a profundizar en su psicología o a estudiar sus emociones. La semblanza que hace del Che Guevara es superficial y es el resultado de una mirada externa, porque el cineasta se queda fuera, como contemplándolo todo desde la distancia del tiempo. El cine de Soderbergh es muy técnico y no se le puede achacar ningún fallo desde un punto de vista objetivo, pero carece del pulso vital de un verdadero narrador, de alguien que pone pasión en lo que hace. “Che. El argentino” es una película metódica que ha seguido un estricto plan de rodaje, preparado y ejecutado según un despliegue estratégico como las propias campañas militares llevadas a cabo por el protagonista y sus camaradas del Movimiento 26 de Julio. Es cine de guerrilla en un sentido puramente formal, pero en todo caso se trataría de una guerrilla fría, por carecer del necesario impulso ideológico, a falta de cualquier rasgo de identificación o militancia.
Cinco minutos de la película de Walter Salles «Diarios de motocicleta» dicen más sobre la verdadera naturaleza del joven Ernesto Gevara que todo el metraje de la primera parte del díptico de Soderbergh, por cuanto nunca nos aclara las motivaciones íntimas de su evolución personal. La fuerza del personaje reside por entero en el carisma del actor Benicio del Toro, al igual que en la impresionante caracterización que Demián Bichir hace de Fidel Castro. Pero el resto de los barbudos que les acompañaron en el camino hacia La Habana parecen meros comparsas, dentro de un colectivo desdibujado y con apariciones intermitentes. Participan en simples anécdotas cotidianas de su lucha, de tal forma que el relato podría empezar y acabar en cualquier punto, y así el final corresponde a un intrascendente pasaje más que renuncia deliberadamente a la épica revolucionaria.