Al Barcelona le sientan mejor los aires europeos que los de andar por casa. Tras caer en Soria y empatar en casa con el Racing, los de Pep Guardiola superaron al Sporting de Lisboa en el arranque de la Champions (3-1).

Los culés comenzaron de dulce, imprimiendo un ritmo endiablado en el último tercio. Messi, Henry y Eto'o -los dos primeros a pierna cambiada-, formaban el tridente. Las ocasiones se sucedían ante la meta de Rui Patricio. Tantas se marraron en los minutos iniciales que las cadenas de los fantasmas comenzaron a tintinar.

Pero entre tanto killer del área surgió en un córner un central como Márquez -la defensa portuguesa se ganó unas vacaciones en galeras- para llevar a la grada un suspiro de alivio que se pudo escuchar hasta en Montserrat (min. 20).

Con la ventaja en el zurrón, los locales aflojaron la zarpa. «Gracias, vamos a tomar un poco de aire», pensaron los lisboetas. El marcador no peligraba, pero se intuía una posibilidad lejana. Hasta el minuto 60. Penalti sobre Eto'o que el camerunés envió a la cazuela. ¿Fin?

No. El Barcelona recordaba a una profesora de francés que, preguntada por qué «eau» se pronuncia «o», contestó: «¿Por qué vas a hacerlo fácil pudiendo hacerlo difícil?». Así que Tonel remató en el 72 para reactivar los nervios de la parroquia (2-1). Hasta que a tres minutos del 90, la conexión Iniesta-Xavi -pase y remate- puso el cierre.

El Chelsea, otro de los favoritos, superó rotundo al Girondins (4-0). El manual de las frases hechas diría que se tomaron un buen sorbo de vino bordelés. Lampard, Cole, Malouda y Anelka certificaron los tres primeros puntos de los de Scolari.

El Atlético de Madrid comenzó con un triunfo de solera en Eindhoven (0-3). El punto de mira del Kun Agüero sigue afinado. Mientras los demás calientan motores, el ¿futuro yerno? de Maradona viene con el rodaje olímpico hecho. Dos zarpazos al PSV. Van a quitar la estatua de Neptuno para poner la suya. La guinda, de Maniche. La cruz, la lesión de Forlán.

Cumplieron Liverpool e Inter, que se impusieron a domicilio frente al Olympique de Marsella (1-2, con doblete de Gerrard) y el Panathinaikos griego (0-2, Mancini y Adriano).

En el capítulo de las sorpresas, empate casero del Werder Bremen con el Anorthosis chipriota y, sobre todo, la derrota de la Roma en el Olimpico ante un desconocido Cluj rumano (1-2).