Consejeros de Banatuz, asociación que engloba a diversas sensibilidades de la izquierda abertzale y representa a los clientes de Kutxa, se mostraron abiertos a negociar su apoyo a la fusión entre la caja guipuzcoana y BBK, siempre y cuando la primera de ellas recoja una parte «fundamental» de los requisitos que exige para apoyar la fusión.

El consejero José Mari Pérez señaló al comienzo de la rueda de prensa ofrecida ayer en Donostia que Banatuz entiende que la fusión de Kutxa y BBK tiene una «gran importancia», sobre todo, «teniendo en cuenta la actual situación social y de crisis financiera».

Pérez indicó que uno de los requisitos para que Banatuz se muestre a favor de la fusión es que «la caja surgida de la operación tenga como objetivo todas las cajas de Euskal Herria». Asimismo, afirmó que Banatuz apoyará el proyecto siempre y cuando «implique una autentificación de la estructura y funcionamiento» de Kutxa, y «un cambio de modelo y una apuesta firme por su función social y desarrollo económico de Euskal Herria».

Por otro lado, Pérez indicó que la entidad resultante de la operación deberá «dar una apuesta clara para reforzar el tejido productivo y social vasco» y «abandonar la política de inversiones inmobiliarias realizadas hasta la fecha con criterios especulativos». Asimismo, el consejero recalcó que el desarrollo sostenible necesita apoyo financiero y consideró que la entidad resultante deberá «centrarse en actuaciones socialmente responsables y de los sectores más necesitados» de Euskal Herria.

Ayudas económicas

Pérez consideró también que la caja deberá «reconstruir su carácter social como tratamiento privilegiado de sus clientes», primando «a los más carentes de recursos económicos» como pensionistas, jóvenes o ayuntamientos con poco dinero. Asimismo, la entidad emergida de la fusión deberá introducir «una política de empleo digno» y sus órganos de dirección «articular mecanismos de participación y democratización» de todos los agentes sociales. Por último, se deberá «destinar mayores cantidades a la obra social».

La plataforma advirtió que todo tipo de fusión que no contemple todos estos elementos será «un enorme error social, un engaño y una nueva frustración para la sociedad vasca».