Indomable Young
«Neil Young Trunk Show: Scenes from a Concert»
Koldo LANDALUZE
Las retinas arden ya cruzado el Ecuador de Zinemaldia y transitada buena parte de la ruta, en Zabaltegi se intuye la floja cosecha cinematográfica que llegó de otros festivales. Por fortuna, al espectador-peregrino siempre le queda la saludable opción de dejarse llevar a través de propuestas tan intensas como la que nos plantea Jonathan Demme en este nuestro segundo encuentro con Neil Young.
Tras una serie de reveses comerciales, Demme remontó algo el vuelo con el notable remake de “El mensajero del miedo”, lo cual, y quizás en un intento por distanciarse de la industria que sólo veía en él a un correcto artesano, se ha refugiado en los territorios del género documental para rodar una serie de proyectos personales entre los cuales se incluye el dueto dedicado al ilustre Young: “Neil Young: Heart of Gold” (2006) y “Neil Young Trunk Show: Scenes from a Concert” el trabajo, todavía incompleto, que hoy nos ocupa. Esta segunda parte del díptico figura como un complemento perfecto del mítico artista canadiense y desde una óptica diferente a la mostrada en “Heart of Gold”. Respaldado por los imprescindibles Ben Keith, Rick Rosas, Ralph Molina, Anthony Crawford y Pegi Young, tropezamos con un Neil Young en estado puro: fiero e indomable. En la alternancia del acústico, piano y electricidad, las sensaciones se disparan en cuanto suenan los acordes de “Spirit road y “Hurricane”, que Demme ha atrapado con un puntillismo envidiable y logrando lo más difícil en estos casos: que la cámara no acapare protagonismo.