El fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Javier Zaragoza, ha ofrecido su «colaboración incondicional» a las autoridades fran- cesas y «todo lo que necesiten» para «construir el proceso penal» que conduzca a la ilegalización de Batasuna en el Estado francés, según informaron ayer fuentes del Ministerio Público.

Zaragoza hizo este ofrecimiento a las Justicia gala tras la detención de dirigentes de Basauna, lo que supone, según algunas fuentes, «el punto de partida para la ilegalización».

Poco después, preguntado por ello en una rueda de prensa en Nueva York, el presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, dijo que «no descarta» pedirla, aunque afirmó que el tema no se ha abordado y quiso matizar que «hablamos de la responsabilidad y la soberanía de un país amigo, como es Francia».

El ánimo ilegalizador que emana del Estado español contrasta con la actitud de electos como el concejal de UMP de Biarritz y consejero general en Pau, Max Brisson, y el senador Didier Borotra, de MoDem, que mostraron ayer su preocupación por las consecuencias que la redada podría tener en la convivencia.

En declaraciones a France Bleu Pays Basque, Max Brisson pidió que se midan bien las consecuencias que esta operación policial podría tener sobre el clima social de Ipar Euskal Herria.

Didier Borotra también mostró su preocupación en la misma emisora, a la que declaró que «hay que estar vigilantes, porque una intervención sobre gente comprometida en la vida política y en un partido que hasta que se pruebe lo contrario no está prohibido aquí merece que se observe muy de cerca. Pienso personalmente que es totalmente legítimo que los vascos puedan expresarse políticamente. Soy parlamentario y seguiré este asunto con atención», prometió como colofón.

El senador por Biarritz añadió que «si hay cualquier ligazón con el terrorismo, por supuesto que considero normal que se intervenga con firmeza. Pero si se trata de dar algún tipo de compensación política en relación con acciones que se dan en el otro lado de la frontera, el mío es un no categórico».

También el dirigente del PS Frantxua Maitia, consejero regional, se declaró «extrañado» por lo sucedido y manifestó que Batasuna es una fuerza política con una actividad pública y conocida. Maitia auguró además que ilegalizar un partido político no sería tolerado en el Estado francés.