Unai Fano y María Lizarraga se encuentran en dependencias policiales de París a la espera de pasar a disposición judicial, pero las autoridades españolas ya dan por seguro que el Estado francés les permitirá juzgarlos en Madrid, aunque los delitos que se les imputen hayan sido cometidos en el otro territorio.

Así lo dio a entender ayer el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, al mismo tiempo que la Fiscalía instaba al juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno a abrir un sumario contra ellos por «integración en ETA», «tenencia de explosivos», «falsificación de documentos» y «robo de vehículo». Se trata de un procedimiento especial que sólo ha sido aplicado a ciudadanos vascos en otra ocasión, según fuentes judiciales españolas.

En Burlata, la localidad de María Lizarraga, se concentraron anoche 80 personas, y 60 lo hicieron por los presos en la vecina Txantrea. En Arrosadia fueron 17. Y en Lazkao 22 vecinos denunciaron el «estado de excepción» en el pleno municipal.