El presidente Ecuatoriano, Rafael Correa, llamó ayer a los ecuatorianos a votar en el referéndum constitucional de mañana. Ante miles de simpatizantes congregados en el estadio de Guayaquil, confió en que ganará el «sí». «Lo importante es que ahora con mucha alegría, entusiasmo, esperanza, vayamos a las urnas, que el gran triunfador sea el pueblo ecuatoriano, la democracia del país, que entendamos que no vamos a elegir alcalde o presidente, sino el futuro».

Correa subrayó que el momento actual, que calificó de «histórico», es una oportunidad «maravillosa» para construir «el nuevo Ecuador por el que hemos venido luchando durante muchas generaciones».

Más de nueve millones de ecuatorianos están llamados a pronunciarse sobre la nueva Carta Magna redactada por la Asamblea Constituyente.

El alcalde de Guayaquil, el opositor Jaime Nebot arremetió contra este proyecto que, en su opinión, llevará a los ecuatorianos a «vivir mal, sin libertad, sin empleo, sin obras».

Correa le respondió que «nació de la resistencia que los sectores populares opusieron al neoliberalismo».