El PSN allana el camino a Sanz dando su aval a los presupuestos navarros
Delegaciones del Gobierno de Nafarroa y del PSN sentaron ayer las bases para los presupuestos navarros de 2009 en una reunión marcada por la cordialidad. Samuel Caro, número dos del PSN, quiso dejar claro además que no exigen que en correspondencia los dos diputados de UPN se abstengan ante los presupuestos estatales. En Madrid, el PSOE también evita presionar a UPN; su portavoz, José Antonio Alonso, confirmó que no piensan reunirse con ellos.
R.S. |
En vísperas de que UPN adopte una posición sobre los presupuestos generales del Estado -con la abstención como opción más sólida por el momento-, el PSN quitó un obstáculo del camino al anticipar ayer su conformidad con los criterios presupuestarios presentados por el Gobierno de Miguel Sanz.
En realidad, el aval del PSN ya se produjo el año pasado y se daba por seguro también en esta ocasión, antes incluso de que UPN lanzara el envido a su socio del PP en el terreno de juego de los presupuestos estatales. Sin embargo, sí es interesante comprobar que el acuerdo en Iruñea ha sido especialmente rápido. Contrariamente a la norma habitual, han bastado dos reuniones, lo que deja claro el interés del PSN en permitir que UPN pueda vender con mayores facilidades la correspondiente abstención en Madrid.
En la misma línea, el portavoz del PSN, Samuel Caro, dijo tras la reunión que no exigen que UPN avale los presupuestos del Gabinete de Zapatero. «Nosotros nunca hemos puesto esa condición -recordó-. Aquí no hay un intercambio de cromos, sino que el PSN ha mantenido una actitud responsable en cuanto a la estabilidad y gobernabilidad de Navarra, y más responsables tenemos que ser todavía en tiempos de crisis». En consecuencia, sí pidió a los diputados y senadores de UPN «un ejercicio de responsabilidad», el mismo argumento esgrimido por Sanz para defender la abstención en Madrid.
Mientras tanto, siguen las dudas sobre cuándo tomará su decisión UPN, que tiene convocado mañana un Consejo Polí- tico, pero en el que se va a encontrar con el mismo problema del lunes pasado, cuando se aseguró que la Ejecutiva iba a zanjar el asunto: ningún otro grupo del Congreso ha anunciado qué hará en la sesión del 22 de octubre, en la que se debaten las enmiendas a la totalidad. Es decir, que si UPN revelara ya cuál será su voto, dejaría al Gobierno Zapatero margen de maniobra para prescindir de otros posibles socios, y con ello podría convertir en imprescindible la eventual abstención de UPN y agudizaría así su crisis con el PP. Por ello, no es seguro que mañana vaya a clarificarse el tema.
El PP avisa de nuevo
En una entrevista radiofónica, el presidente del PP, Mariano Rajoy, reiteró ayer que las decisiones en el ámbito estatal, según el pacto, corresponden a su partido y no a UPN. aunque eludió precisar si éste se romperá en caso de que UPN se desmarque.
María Dolores de Cospedal, secretaria general del partido, insistió mientras tanto en hacer ver a UPN que los presupuestos del Gobierno del PSOE son «malos» para el conjunto del Estado y para Nafarroa. El problema añadido para Sanz es que otro tanto dijo anteayer uno de sus diputados, Santiago Cervera.
Como ocurrió el lunes en la Ejecutiva, muchas fuentes afirman que UPN decantará su voto en el Consejo Político de mañana, pero ningún grupo lo ha clarificado hasta ahora y hay casi dos semanas hasta el Pleno del día 22.
Mientras UPN y PSN presentaban su principio de acuerdo presupuestario para 2009, Nafarroa Bai ofrecía una rueda de prensa para proponer otra receta ante la crisis económica: una ponencia en la que estén los grupos parlamentarios, que definió como «pacto por la transparencia». Horas después, la iniciativa fue votada y rechazada en la Comisión de Hacienda. Ningún otro grupo la hizo suya.
Maiorga Ramírez presentó un documento en el que se denuncia que la negociación entre UPN y PSN está provocando un «oscurantismo interesado». Reclamó una «comisión anticrisis multipartita», en la que participarían sólo Gobierno y grupos parlamentarios, así como la superación del actual modelo de concertación social «incluyendo a las formaciones sindicales hasta ahora excluidas y la participación del conjunto de los representantes de la ciudadanía, sin exclusiones».
La coalición presentó además algunas medidas fiscales concretas para responder a la crisis. Destaca la de «no implantación de la medida de los 400 euros, que supone un gasto fiscal de 63 millones de euros y carece de los efectos que se le atribuyen». NaBai pide además que se mantenga el Impuesto del Patrimonio o se revise el Convenio Económico para que Nafarroa pueda fijar su emisión de deuda pública sin depender del Estado. GARA
