Los 16.000 participantes en la Behobia, que se celebrará el próximo 9 de noviembre, ya tienen nombres y apellidos. 14.500 consiguieron el preciado dorsal en el plazo de cuatro días, previo pago de 27'5 euros -dos euros más barato para los propietarios del chip amarillo Championchip. El pasado 28 de mayo se abrió la inscripción y después tuvo que interrumpirse por colapso para reanudarse y concluir el 4 de junio con el trámite ordinario. Todo un récord, uno más para la carrera de las cifras en Euskal Herria.

A estos 14.500 hay que sumar los 1.000 destinados a la promoción de Adidas, los 500 de la agencia de viajes que ofrece paquetes con todo organizado, principalmente para la gente de fuera, y un último paquete también de 500 para Caja Rural. En setiembre, además, se cerró la lista de espera a la que se habían apuntado 1.500 interesados de los que 400 finalmente han conseguido dorsal. De los 14.700 inscritos el pasado año comparecieron 12.800 en la salida, una diferencia que la organización consideró normal en la línea de otras carreras masivas y que podría repetirse en el futuro.

No hace mucho tiempo los datos de participación de la Behobia se conocían días después de la celebración de la misma. Ahora se establecen hasta seis meses antes. Por eso también se sabe que en la inscripción de 2008 la participación de mujeres llegará hasta el 14'5%. Durante las últimas ediciones se han manejado porcentajes en torno al 9 y el 10%, aunque el pasado año la presencia femenina creció hasta el 13'9%, cifras mejorables en opinión de los responsables del Club Deportivo Fortuna, organizador de la reina de las populares.

Buenas noticias desde Goteborg

Comprobando los datos de la presencia del Estado francés descubrieron que entre los 3.000 participantes provenientes de Iparralde, pero sobre todo de Pau y de Burdeos, la presencia de mujeres alcanzaba el 22%. También miraron al Medio Maratón de Goteborg, la decimoquinta prueba más grande del mundo, que acostumbra a reunir a más de 30.000 atletas y con cuyos responsables han entablado una relación y el correspondiente intercambio de experiencias.

Los responsables de la Goteborgvarvet realizaron publicidad en los lugares frecuentados por mujeres ofreciéndoles entrenamientos, que por cierto son mixtos. Si en 2000 constituían el 17% de la multitudinaria carrera sueca, esta primavera han subido al 29%. «Hemos decidido pasar a la acción. Hasta ahora lo contabilizábamos pero nada más. Ese abandono en masa que se da por parte de las chicas de 13 ó 14 años que de repente dejan de hacer deporte tiene que tener una solución. Algo falla. Si queremos una sociedad más igualitaria también hay que mirar el deporte y el tema de la ocupación de los espacios públicos», asegura Iñigo Etxeberria, coordinador de la Behobia.

La antropóloga Carmen Díez les ha orientado en este aspecto en el que también es importante la creación de modelos. «Si las niñas sólo ven a hombres corriendo, a su padre, su tío o su primo y no tienen un modelo femenino que haga lo mismo se crea un muro», responde Etxeberria.

Para evitarlo el club donostiarra ha planteado una iniciativa a instituciones y patrocinadores consistente en facilitar entrenamientos a las mujeres interesadas en practicar atletismo con la colaboración de algunos Ayuntamientos de Gipuzkoa.

Siguiendo el precedente del Ayuntamiento de Azpeitia, que en coordinación con la Lilaton ya había puesto en marcha un programa similar, Arrasate, Donostia, Hernani, Irun y Tolosa se unen a un proyecto que de octubre a junio, dos días a la semana, enseñará a las interesadas a efectuar estiramientos, controlar el esfuerzo y demás pautas de interés para correr sin problemas.

El resultado se verá en el futuro. «Nos hemos puesto un objetivo, 2012 20%» resume el coordinador que completa cifras con la presencia guipuzcoana, como es tradicional la más numerosa. De nuevo, los corredores de casa han respondido al máximo. «El boom se dio el año pasado cuando se pasó de 4.000 a 6.000. Éste se han inscrito 7.000. Corre el boca a boca y a nosotros nos alegra mucho», concluye el coordinador.