Redada en Iruñerria
Los detenidos denuncian «la bolsa» y golpes para imponerles la declaración
Ocho días después de su detención, los jóvenes Gorka Sueskun, Iker Araguas e Ibai Azkona han podido explicar a sus abogados el trato recibido en dependencias policiales. Refieren que a los tres se les aplicó «la bolsa» y que Araguas fue amenazado con obligarle a comerse su vómito. Azkona da cuenta además de tirones y apretones en los testículos. Todo ello con un fin: imponerles una declaración determinada. Otros cuatro jóvenes siguen incomunicados.
GARA | IRUÑEA
Los padres y madres de los cuatro jóvenes detenidos la pasada semana recordaban el viernes que los anteriores quince arrestados en Nafarroa habían referido torturas o malos tratos. La lista aumenta ahora, porque también Gorka Sueskun, Iker Araguas e Ibai Azkona han dado cuenta de tormentos similares. No lo pudieron hacer hasta ayer, ya que habían pasado siete días incomunicados: cuatro en comisaría y tres en la cárcel.
El movimiento pro-amnistía transmitió su denuncia con pelos y señales. Los detalles son abundantes, y coinciden en muchos puntos con los narrados por anteriores detenidos, sobre todo en lo que respecta a la aplicación generalizada de «la bolsa», a los golpes y a las amenazas referidas a familiares.
Al levantarse la incomunicación han salido a la luz otros datos, como dónde se produjeron las detenciones y cuándo fueron llevados a Madrid (el día siguiente, igual que los detenidos este pasado lunes). Gorka Sueskun ha explicado que en el mismo viaje ya le pusieron la bolsa en la cabeza para dejarle sin aire. Ibai Azkona concreta que hizo el camino con la cabeza metida entre las piernas, y que sus capturadores pararon el coche en un momento para estirarle y apretarle los testículos.
Este joven de Iturrama añade que sufrió «la bolsa» en dependencias policiales y que cuando en una ocasión intentó romperla los policías le ataron las manos a la espalda. Por lo que respecta a Iker Araguas, se explica que esto le produjo ganas de vomitar y que los agentes le instaron a no hacerlo porque «si no, tendría que comérselo todo».
La denuncia incluye otros muchos detalles: que los jóvenes fueron obligados a mirar al suelo en todo momento, que tuvieron encendida la luz y escucharon un ruido muy desagradable, que se les tiró del pelo y que se les golpeó sobre todo en el estómago. Azkona ha explicado desde Soto del Real que todavía sufre dolores en esa zona. Como en ocasiones anteriores, también se les amenazó con la colocación de electrodos sin llegar a hacerlo, según han detallado los tres encarcelados.
Apostillan que el objetivo de todo ello era imponerles una determinada declaración policial. Sueskun ha matizado que se le dio un papel para que lo memorizara, mientras que los otros dos explican que la Policía les indicó que debían decir. Posteriormente, como es sabido, fueron mantenidos incomunicados en prisión mientras se practicaban más arrestos.
El movimiento pro-amnistía añade que los tres denunciaron esta situación ante el juez de la Audiencia Nacional, y que Azkona y Araguas también se lo notificaron al médico forense. Este último había sido operado de hernia discal recientemente.
Sin datos de los otros cuatro
La difusión de estos datos aumenta la preocupación por el estado de los cuatro detenidos el lunes, que siguen en manos de la Policía española. La defensa reclamó ayer al juez de guardia, Fernando Andreu, que tome medidas contra la tortura, pero éste se limitó a indicar que el caso lo lleva Grande-Marlaska y le trasladaría la petición.
«El Gobierno español usa la tortura contra la ciudadanía vasca, para sacar información política, para conseguir las autoinculpaciones que quiere y para extender el miedo. Rubalcaba y Zapatero utilizan la violencia más salvaje», subraya el movimiento pro-amnistía. Hace ver además a los medios de difusión que su actitud «abre camino a nuevos casos de tortura». «Quien oculta esto también la hace posible», recalca.
Iruñean egin duten azken polizia operazioan atxilotutako lau gazteen senideek eta lagunek agerraldia egin zuten atxilotuei lehenbailehen inkomunikazio egoera altxa diezaieten eskatzeko. Hala, Iker Aristu gaztearen arreba Erkuden Aristuk Polizia espainolak frogarik erakutsi gabe euskal gazteak atxilotu eta inkomunikatzeko duen zigorgabetasuna salatu zuen. «Hedabideei esker jakin dugunagatik Segiko kideak izatea eta kale borrokako arduradunak izatea leporatzen diete, baina ez dakigu zein ekintza zehatz egozten dizkieten, epaileak sumarioa sekretupean gordetzen du-eta», gaitzetsi zuen Aristuren arrebak, eta egun euskal gazteriak jasaten duen «babesik gabeko egoera» salatu zuen.
Hala, une honetan Iker Aristu, Mikel Marin, Iñaki Marin eta Diego Oktabio «torturak eta tratu txarrak jasateko arrisku larrian» daudela ohartarazi zuen, eta Amnesty Internationalek edo Nazio Batuen torturen aurkako ikuskariak Euskal Herrian jokabide polizial horiek oso ohikoak direla egiaztatu dutela gogorarazi zuen. Bestalde, azken asteotan Nafarroan gertatzen ari diren atxiloketen aurrean alderdi politikoek azaldu duten «hipokrisia» gaitzetsi zuen. «Horrelako operazio polizialen aurrean alderdi politikoak ezin dira beste behin ere ezer esan gabe geratu eta indar errepresiboak babestu, ez udaletan, ez Nafarroako Parlamentuan, ez Madrilgo Kongresuan».
Atxiloketak salatzeko manifestazioa deitu zuten larunbaterako. 18.00etan irtengo da Iturramako Bulebarretik eta Donibanerako bidea hartuko du. Bestalde, atxiloketok salatzeko, elkarretaratzea egin zuten Tolosan eta errepidea moztu zuten Iruñeko Arrosadia auzoan.