El diputado de Desarrollo Sostenible de la Diputación de Gipuzkoa, Carlos Ormazabal, explicó ayer que el Consorcio de Residuos deberá invertir un total de 384 millones de euros en los próximos años en la construcción de cuatro plantas de compostaje y una incineradora.

Ormazabal presentó en rueda de prensa el anteproyecto de norma foral de residuos de Gipuzkoa, que recoge los objetivos y previsiones incluidas en el documento de progreso del Plan Integral de Gestión de Residuos Urbanos de Guipúzcoa (PIGRUG).

Esta norma incluirá la construcción de cuatro plantas de compostaje, una más de las previstas inicialmente, en las comarcas del Urola, que ya existe, Bidasoa, Goierri y Debagoiena, además del Centro de Tratamiento de Residuos de Zubieta, en el que pretenden ubicar la incineradora. Para todas estas infraestructuras, el Consorcio invertirá 384 millones de euros, de los que 126,9 millones, el 33%, equivalente a la participación de la Diputación en esta entidad, serán aportados en cinco años por la institución foral.

Para pagar el resto, Ormazabal explicó que se están buscando vías de financiación a través de créditos, cuyos gastos se cargarán a cuenta de la nueva tarifa única que el Consorcio cobrará a las mancomunidades a partir del próximo 17 de julio.

La norma convierte las previsiones del documento de progreso del PIGRUG en precepto de «obligado cumplimiento», según explicó el diputado foral.

Dichas previsiones establecen un objetivo de reducción de 60.000 toneladas anuales de las basuras para el año 2016, año en el que se prevé reciclar o compostar el 57% de los residuos, mientras que el 43% se destinará a la incineración.