Liga ACB Victoria de Iurbentia Bilbao Basket en el primer partido de La Casilla de la temporada 2008/09
El sprint final de Seibutis y Blums rompe a un duro ViveMenorca
La variedad de recursos de los bilbainos valió para que éstos doblegaran a un rival correoso en un partido con escasa brillantez.
BILBAO BASKET 74
VIVEMENORCA 62
Arnaitz GORRITI | BILBO
En honor a la verdad, la ventaja final de Iurbentia Bilbao Basket sobre ViveMenorca fue excesiva. Sin embargo, bendito sprint final. Seibutis y Blums se destaparon en unos últimos minutos de gran calidad, en lo que fue un partido más duro que brillante. Los de Vidorreta encadenaron su segunda victoria de la campaña -por vez primera, Bilbao Basket gana los dos primeros choques de la temporada- gracias a su constante pelea, a la mano de Salgado, y al sprint final de Blums y Seibutis.
No obstante, los primeros compases del choque no invitaban a nada bueno. Los de Ricard Casas, además, supieron enchufarse antes por medio de un Boisa que hizo gala de una excelente muñeca desde lejos. Por el lado bilbaino era Salgado quien daba la réplica anotadora, pero sin apenas incidencia en cuanto al juego colectivo. Por añadidura, el dominio en los rebotes daba a los visitantes la iniciativa en el juego. A falta de brillantez, la segunda unidad bilbaina, con Banic y Guardia a la cabeza, dieron otro aire al equipo local, principalmente en el aspecto defensivo.
No obstante, ViveMenorca seguía mandando en el marcador. El ala-pívot de Pasai Antxo Urko Otegi protagonizó varias acciones meritorias -precioso su duelo con Guardia- que dieron una máxima ventaja de seis puntos a los de Casas. Por parte bilbaina, una noticia mala, y otra buena. La mala, la tercera falta de Lewis -poco respetado por los árbitros-; la buena, la gran mano de un Ronnie Seibutis que, además, supo conectar con la afición. Al descanso, pírrica victoria balear por 27-31.
De tres en tres
La confianza de jugadores como Javi Salgado o Paco Vázquez hace que, antes o después, sus tiros entren. De esta guisa, Bilbao Basket no tardó en voltear el marcador al inicio del tercer período, ya que la pareja exterior anotó varios triples seguidos, pasando del 32-33 al 44-38.
No obstante, el cuadro menorquín no iba a rendirse. Los de Ricard Casas echaron mano de su juego colectivo, capturando numerosos rebotes en ataque, rozando la falta en múltiples ocasiones, para ponerse a un punto al final del tercer cuarto: 50-49. Aquellos minutos de Blums fueron desastrosos, ya que ni pudo seguir la pauta anotadora del de Santutxu, ni acertó a dirigir. Lo mejor estaba por llegar.
Con más emoción que calidad, el último asalto fue un duelo en toda regla entre los dos bases titulares. Salgado contra un Jeter que aparecía justo a tiempo para la «fiesta». Tras anotar nueve de los once primeros puntos de su equipo, Jeter volvía adelantar al ViveMenorca por un exiguo 59-60.
Fue en ese momento cuando afloraron los nuevos fichajes bilbainos. Dos grandes penetraciones de Seibutis y una suspensión de Blums dieron otra vez la ventaja a los locales: 67-62 a falta de un minuto.
Jeter asumió la responsabilidad una vez más, pero Blums, que ejerció una defensa muy buena en los últimos instantes, frenó en seco al estadounidense con un tapón. El consiguiente contraataque convertido por Blums desató la fiesta del triunfo en las gradas de La Casilla.
Aunque el tramo final de los exteriores bilbainos lo solape justificadamente, hay que subrayar el precioso duelo bajo los tableros entre Urko Otegi y Salva Guardia. El «combate» acabó en tablas y se agradece sumamente su esfuerzo.
Contento, Txus Vidorreta valoró de forma muy positiva la victoria ante ViveMenorca, en la que agradeció la tendencia al alza de su equipo.
«A diferencia del partido contra Estudiantes, en el que fuimos de menos a más, y a mucho menos, hoy ¯por ayer¯ siempre hemos ido a más, de modo que mis sensaciones son distintas».
Pese a irse por debajo al descanso, el de Indautxu confesó mostrarse «confiado» de la reacción de los suyos, en caso de seguir duros en defensa. Además, Vidorreta declaró que «cada día aparecen nuevos jugadores, que es lo que me `mola'. Javi y Seibutis han hecho un gran partido en ataque, y Blums ha robado cinco balones. No dependemos de uno, sino de once».