ELA, LAB y UGT denuncian que Tubacex invididualiza el convenio
ELA, LAB y UGT han denunciado la intención de Tubacex de eludir la negociación de las condiciones laborales con los sindicatos para individualizar las relaciones laborales, y en su opinión, es el modelo que quiere implantar a los nuevos trabajadores. A pesar de contar con el apoyo de dos sindicatos para firmar su última propuesta, la dirección la retiró para que cada empleado la firme de forma individual.
GARA |
ELA, LAB y UGT denunciaron que la empresa Tubacex TTI-Aceralava ha dado por agotada la negociación del convenio, pese a contar con la adhesión de dos sindicatos con mayoría suficiente, y «ha coaccionado a la plantilla para que firme el acuerdo de forma individual».
Según explicaron, hasta la fecha, se habían llevado acabo cinco reuniones negociadoras con el comité intercentros de Tubacex tras lo que la dirección había logrado la firma de los sindicatos STAT y CCOO en su propuesta. Esta adhesión suponía la representación del 54,83% de la plantilla, es decir la mayoría suficiente para contar con un convenio de eficacia general. Por su parte, LAB, ELA y UGT se posicionaron en contra de la propuesta al considerarla insuficiente tanto por la vigencia como por los contenidos.
Pese a ello, según señalaron estas tres centrales, la dirección dio por agotada la negociación y eludió la firma por parte de los sindicatos que apoyan su propuesta. «En una decisión sin precedentes, obliga a todos los trabajadores y trabajadoras de Tubacex, bajo el chantaje de no aplicación de los acuerdos con efectos al 1 de enero, a firmar en calidad de adhesiones individuales la aceptación de su oferta empresarial», denunciaron
Nuevo modelo de relaciones
Las condiciones laborales en Tubacex están reguladas por un convenio cuya vigencia finalizó en 2007 y acuerdos individuales con cada trabajador «que no están bajo el control sindical, pero que regulan materias de convenio, como jornada, incrementos salariales, contratos de relevo, empleo, ascensos o promociones», explicaron los representantes de LAB, ELA y UGT, quienes calificaron como «un ataque sin precedentes al derecho a la libertad sindical» el hecho de que la dirección niegue la negociación colectiva con los sindicatos llevándola al terreno individual con cada trabajador.
Añadieron que esta decisión «antisindical y antiobrera, viene precisamente de una empresa que presume de ser galardonada con el premio a la mejor empresa del año y al mejor empresario del año, y que está batiendo todos los récords absolutos en cuanto a beneficios».
En su opinión, la decisión empresarial no es un hecho casual, sino que se trata de una decisión «muy meditada» porque pretende crear las bases para un nuevo modelo de relaciones laborales donde los sindicatos no tengamos cabida y donde se prime lo individual frente a los derechos colectivos». Creen que este cambio tiene como principal objetivo los trabajadores incorporados más recientemente ya que en el plazo de cinco años se va a producir un relevo generacional «casi completo». Para rechazar esta medida, los tres sindicatos han convocado movilizaciones entre las que destacaron la manifestación que tendrá lugar el próximo 5 de noviembre en Laudio y para la que han solicitado la adhesión de los comités de empresa de la zona. Además, continuarán con las protestas «hasta retomar la negociación del convenio y recuperar el marco de negociación».
Por otro lado, criticaron «el silencio cómplice de STAT y CCOO por su postura inmovilista». Precisamente, CCOO respondió afirmando que los delegados de LAB, ELA y UGT en la empresa se han adherido individualmente a la propuesta de la empresa.
CCOO justificó su postura porque no irá «contra las decisiones de su asamblea de afiliados para justificarles a ellos». Sobre las adhesiones individuales a la oferta empresarial, CCOO lo entiende como una consulta de la empresa al sostener que «el referéndum que teníamos que haber hecho nosotros lo ha hecho la dirección y si la plantilla ha dicho sí es porque era una oferta buena».
El período de consultas sobre el expediente de regulación de empleo presentado por Esmaltaciones San Ignacio concluyó ayer sin acuerdo alguno entre comité y dirección. La empresa eludió las propuestas del comité para estudiar la posibilidad de aplicar bajas incentivadas, prejubilaciones o contratos de relevo e insistió en la eliminación de 36 puestos de trabajo. De hecho, aún tiene pendiente la presentación del estudio sobre prejubilaciones que demandó el comité. Según el comité tampoco explicó qué criterios a seguido para elegir estos puestos de trabajo. Pero previamente, los representantes del comité exigieron la retirada de la lista que ha hecho pública con los nombres de las 36 personas afectadas, así como que se disculpara por el daño causado a estos trabajadores.
La empresa presentó un estudio sobre los productos que fabrica, sobre el que comité reclamó una explicación más detallada.
En opinión del comité, la empresa mostró «falta de seriedad» y no querer saber ni negociar nada manteniendo como única alternativa sus 36 despidos. Los trabajadores de Esmaltaciones San Ignacio siguen adelante con las movilizaciones. Hoy llevarán a cabo un paro de cuatro horas y una concentración frente al Palacio de Justicia. Además, se reunirán con el juez de lo mercantil encargado del proceso concursal en el que se encuentra la empresa.
El Ayuntamiento de Gasteiz llevará a pleno la moción aprobada en junta de portavoces en la que demanda que no se adopten medidas de destrucción de empleo y sin negociar con la plantilla.
LAB, ELA y UGT han convocado una manifestación en Laudio el próximo 5 de noviembre para la que llaman adherirse a los comités de la zona.
