El PSOE había anunciado la presentación ayer de una propuesta «de calado político» sobre la clave de un nuevo Estatuto, pero la comparecencia no ofreció nada nuevo. Su candidato a lehendakari, Patxi López, se compromete únicamente a impulsar un retoque de la actual norma en la que se puedan incluir cuestiones que el Gobierno del PSOE ha vetado en Madrid, como la convocatoria de consultas sólo sobre algunas materias o el traspaso de competencias comprometidas hace mucho tiempo.

Todo ello fue enunciado por López rodeado de dirigentes de su partido y con cierta solemnidad, ante el Museo Guggenheim de Bilbo. En el cartel que presidió el acto se veía a figuras del PSOE que impulsaron el Estatuto de 1979, y se establecía una continuidad entre el Estatuto de 1936, el aprobado hace 29 años y el que López quiere acordar ahora siguiendo lo que ha hecho el PSOE en otros puntos del Estado. 1936, 1979 y 2008 eran las fechas que figuraban en el cartel.

Con estas referencias, Patxi López dijo que se compromete a que «cuando sea lehendakari» se reunirá con las fuerzas parlamentarias para pactar una reforma del Estatuto que establezca «claramente las fórmulas para la consecución definitiva de las transferencias», así como para regular la capacidad de realización de consultas «en materias para las que se tenga competencia». Recordó que así ocu- rre en Catalunya o Andalucía, curiosamente dos casos que fueron evocados por Lakua y que no prosperaron frente a los recursos del Gobierno del PSOE y del PP.

En el día en que no se pudo celebrar la consulta anunciada por Ibarretxe, López remarcó paradójicamente que es el Estatuto de Gernika «el que garantiza nuestro derecho a decidir».

En tono rimbombante, añadió que por eso el 25 de octubre «es un día de alegría y esperanza. Un día en el que los socialistas queremos reafirmar la vigencia del Estatuto y el valor de sus potencialidades para avanzar como país y como sociedad. Queremos reafirmar el valor del Estatuto como marco de convivencia democrática, porque define una Euskadi en la que cabemos todos, porque respeta la pluralidad y diversidad de la sociedad vasca, sin discriminaciones ni divisiones ficticias».

«Futuro sin violencia»

En paralelo, el aspirante a lehendakari y secretario general del PSE situó el 25-O como «un día de recuerdo y de homenaje a todas las víctimas del terrorismo, asesinados precisamente por representar y defender la libertad, la convivencia y los valores democráticos». Y añadió que el Estatuto es la vía correcta para que «más pronto que tarde, podamos conseguir un futuro para Euskadi sin la hipoteca de ETA y de la violencia».

Tras citar 1936 y 1979, Patxi López hizo hincapié en que «la sociedad vasca avanza y se constituye en sujeto político sólo cuando es capaz de reconocerse y respetarse en sus diferencias internas».

Emplazó a no abandonar ese camino que «otros quieren dar por acabado irresponsablemente. Los socialistas seguimos en el Estatuto. Otros proponen abandonarlo sin decir claramente adónde quieren llevar a esta sociedad», se quejó.

En este contexto, negó que el PSOE obstruya el desarrollo del Estatuto, pese a la evidencia acumulada en los últimos años o a la reciente cesión de parte de la competencia de I+D+I producida en el marco de la negociación de los presupuestos estatales y por la necesidad de apoyos de Zapatero. Para argumentarlo, López citó que el PSE presentó en el Parlamento de Gasteiz una propuesta en favor de desarrollar el Estatuto y otra en pro de renovarlo.

Compromisos

Dicho todo esto, el candidato a inquilino de Ajuria Enea enunció una serie de «compromisos», que comienzan por el de llamar a las fuerzas políticas para abordar «la actualización y reconstrucción del pacto estatutario» siempre que «exista consenso para ello».

Dijo que ese nuevo Estatuto contemplaría en su exposición de motivos que «no partimos de cero». Y añadió que su mejora sería «en clave de más democracia, más libertad, más derechos de ciudadanía para la sociedad vasca y más voluntad de deslegitimar ética, social y políticamente al terrorismo».

«Llamaré a todas las fuerzas políticas para zanjar de forma definitiva los desacuerdos sobre competencias y establecer claramente las fórmulas para la consecución definitiva de las transferencias que acordemos, así como para adaptar los mecanismos estatutarios a las nuevas realidades políticas y sociales», añadió López.

En el acto intervinieron una mujer que nació en la fecha del primer Estatuto, llamada Libertad Betolaza; una joven de 1979, fecha del Estatuto de Gernika, Nekane Ortiz de Laia; y otro que va poder votar ahora por vez primera, Sergio Pérez.

Tras las intervenciones, todos ellos entonaron juntos el ``Gernikako Arbola''.