Mikko Hirvonen (Ford) se hizo con la victoria en el rally de Japón, decimocuarta prueba del Mundial, en la que Sebastien Loeb (Citroen) mantuvo la tercera plaza en la que empezaba y se hizo así con su quinto título mundial consecutivo.

El piloto francés sólo necesitaba los seis puntos de la tercera plaza para sentenciar matemáticamente el título. Tras el abandono de ayer del noruego Petter Solberg (Subaru), el único que le podía incomodar de alguna manera, Loeb apenas tenía presiones desde atrás.

Pero no fue fácil, porque un trompo en el penúltimo tramo a doscientos metros del final cerca estuvo de provocar el drama. Sabía que tenía que asegurar el puesto y arriesgar lo imprescindible y ahí el galo no se encuentra a gusto porque dice que se descentra.

La última jornada del rally ofreció la inesperada lucha por la victoria del finlandés Jari-Matti Latvala, compañero de Hirvonen y segundo piloto de Ford, que llegó a estar a poco más de cinco segundos de su jefe de filas. Pero en la segunda parte aflojó y no se interpuso en la victoria de Mikko.

Tras el rally, la diferencia entre Hirvonen y Loeb queda en diez puntos a favor del segundo. En caso de victoria de aquél y abandono de Loeb en Gales, empatarían a puntos y el título se decantaría en todo caso por el francés por su mayor número de victorias.

Constructores

Pero si el título de pilotos ya está decidido, no sucede lo mismo con el de constructores. Citroen pudo sentenciarlo en Córsica y en Japón, pero al final todo se decidirá en Gales. Con este título, Sebastien Loeb se convierte en el piloto con mayor número de títulos del Mundial de rallys, con cinco y de forma consecutiva.

La próxima cita del Mundial será en Gales entre el 5 y el 7 de diciembre.