LAGUNAK 1

REAL SOCIEDAD 1

El Lagunak y la Real Sociedad no pasaron del empate en el derbi de la Superliga, en el que el principal protagonista fue el estado del terreno de juego debido a la cantidad de lluvia que tuvo que soportar el campo.

Las condiciones en las que se tuvo que jugar el partido fueron muy malas para que se pudiera jugar un partido con un mínimo de calidad. De esta manera, los dos equipos se dedicaron a evitar fallos defensivos por culpa de que el balón se pudiera quedar a mitad de camino en cualquier pase que, en condiciones normales, no entrañaría dificultad alguna.

De esta manera, los rechaces largos para evitar complicaciones se convirtieron en una tónica habitual. Además, el juego por las bandas no se podía practicar porque en esa zona se acumulaba la mayor cantidad de agua y hacia muy difícil la progresión por esas zonas, por lo que los dos equipos tuvieron que jugar el balón por arriba, ya que hacerlo por el suelo era imposible, por la cantidad de agua acumulada.

A pesar de ello, es destacable la capacidad combativa de ambas escuadras que se emplearon a fondo en un juego, eso sí, poco preciso y muy físico.

Las ocasiones fueron escasas y se limitaban a alguna acción a balón parado o en algún disparo lejano. La verdad es que la triangulación e intentar rasear el balón era un objetivo poco práctico, por lo que en la primera parte, las dos porteras apenas tuvieron trabajo.

El inicio de la segunda parte fue idéntica a la primera, pero tampoco se podía hacer mucho más, ya que la lluvia seguía y seguía y las condiciones del campo cada vez eran peores.

Y en una jugada a balón parado llegó el gol de la Real Sociedad, cuando Maite Lizaso acertó a conectar un buen remate, a la salida de un córner, adelantando al conjunto donostiarra.

Parecía que, tal y como estaba el partido, lo más difícil estaba hecho para las visitantes. Las entrenadas por Garmendia retrocedieron y dejaron el balón a las locales, para intentar buscar una contra y sentenciar el choque. Pero, el Lagunak sacó toda su casta y no se dejó amilanar. Poco después del gol realista, un balón recuperado en el medio campo por la medular local, permitió a Eunate culminar una jugada de contraataque al plantarse en un uno contra uno ante Eli Sarasola y batió por bajo, poniendo las tablas en el electrónico. Todavía restaban 1o minutos largos para concluir el choque, pero el marcador no se volvió a mover. Ninguno de los equipos quería tomar riesgos y los dos contendientes se conformaron con el reparto de puntos, la primera de Real Sociedad lejos de Zubieta.