Raimundo Fitero
Troceado
El pastel publicitario ha menguado y como las audiencias se van fragmentando, las cadenas están aplicando campañas agresivas para mantener a sus clientes o para buscar nuevos, lo que significa aplicar unos descuentos descomunales y entrar en una guerra realmente peligrosa. Algunos productos de consumo solamente existen si se anuncian reiteradamente en los medios de comunicación de masas. Pero otras mercancías o productos que son considerados necesidades básicas, no precisan de esa presión constante. Es una ecuación simple que los economistas explican como si se tratase de una revelación.
Con el pastel tan troceado, las porciones que llegan a cada concurrente son muy limitadas y ello repercute de manera muy directa en toda la escaleta de la programación. Las rebajas van a llevar a supresión de muchas conexiones, a terminar con fichajes estrellas y a crear en los servicios básicos de funcionamiento unos equipos ligeros, sin apenas cargas, que escape a las locuras del mercado y se inscriba en una política de contención de gasto que siempre acaba repercutiendo en los salarios, y por lo tanto, en las posibilidades de seguir proporcionando a las audiencias los cebos a los que se les ha acostumbrado y que han ido funcionando relativamente bien hasta que las burbujas se van explotando por simpatía.
Es un círculo terrorífico, un sistema basado en el estrellato, con unos sueldos fuera de toda norma, con unas audiencias que crecían y los anunciantes gastaban el dinero en base a esa repercusión cuantitativa, ha llegado a su agotamiento y no existen estímulos suficientes para reactivarse con las viejas fórmulas. Bajando los números absolutos, y los relativos, todo el esquema se resquebraja y el futuro se nos presenta como un reconversión salvaje en su primera fase hasta que se logren equilibrar y se conozcan realmente los recursos disponibles. Las comerciales privadas presionarán políticamente para que las comerciales públicas no tengan doble financiación con dinero de los presupuestos y con publicidad. Es una de las soluciones. La otra poner mucha más basura y más barata. Pero troceada y si es necesario triturada y aromatizada.