«No he ganado una carrera, siempre he sido un trabajador y he estado muy a gusto»
Corredor del Benfica
Es uno de los muchos buenos corredores vascos que están sin equipo por la crisis del ciclismo, pero vive su situación desde la tranquilidad que le dan sus 33 años y su satisfacción por haber rentabilizado en sus diez como profesional todo el sacrificio realizado por este deporte. Está contento con lo que ha recibido y orgulloso de haber encajado en el rol de gregario después de apuntar alto en sus inicios.
Joseba ITURRIA |
El de Mallabia cumple 34 años en marzo, pero mantiene la ilusión que tenía cuando debutó en profesionales en 1999 en Euskaltel. En su segundo año en el equipo dio un gran nivel, pero prefirió ser buen gregario en Once (2001-03) e Illes Balears (2004-2006) antes de empezar en el 2007 en Benfica una etapa que acabará ahora con la desaparición del mejor equipo portugués.
¿Le han confirmado la desaparición del Benfica?
No nos han comunicado nada de forma oficial, pero es demasiado tarde para que un equipo decida continuar. Hay corredores con contrato a los que están intentando reubicar en otro equipo. Hasta ahora el ciclismo portugués tenía buena salud con bastantes equipos decentes. He tenido la suerte de coincidir con buena gente y estoy muy contento con mi etapa allí. El proyecto era de cinco años, pero la situación del ciclismo no ayuda para nada, no hay patrocinios y es una pena, porque la falta de equipos que había aquí ahora ha llegado allí. El ciclismo lleva cuatro o cinco años en crisis y ahora se ha acentuado más con el miedo a invertir y gastar dinero en patrocinios. No hay equipos, los corredores buenos rebajan el caché y todos bajamos luego. El más perjudicado es el que está en el último escalafón, que no encuentra equipo.
¿Espera encontrarlo usted?
El tema lo lleva mi representante Antonio Vaquerizas, que sabe moverse y yo estoy al margen de todo, bastante tranquilo. No quiero agobiarme mucho y estar demasiado pendiente porque el corredor desde casa poco puede hacer. No tenía contrato con Benfica para el 2009, pero siempre hay alguna posibilidad y hay que mirar las cosas hasta que sea demasiado tarde. Veo que el mercado no se ha cerrado, se está moviendo el tema más tarde que ningún año por la indecisión de los equipos y se tienen que cerrar bastantes contratos todavía.
¿Cómo valora su temporada?
Estoy contento con mi trabajo menos en los tres últimos días de la Vuelta a Portugal. Todo el año he estado a buen nivel y he cumplido lo que se me ha exigido de trabajar para los líderes y salvaguardarlos. La pena es que Javier Benítez, un sprinter muy bueno, no ha rematado muchas faenas y Barbosa, otra estrella, ha empezado a correr tarde y eso no ha ayudado a encontrar sponsor. Pero estoy satisfecho y por eso quiero seguir, aunque estoy tranquilo por mi edad. Si tuviera 25 años estaría inquieto. Con 33, si no hay ninguna opción y hay que dejar la bici, la edad te ayuda a afrontar las situaciones de otra manera. Estamos en un momento de supervivencia en el que los equipos fichan dos corredores por el precio de uno. El bache es muy gordo y hay que intentar sobrevivir. Mi ilusión es seguir, pero me da más pena por los chavales de 25 años que han hipotecado su juventud y no van a sacar partido de eso. Ese es un trago bastante difícil de digerir porque desde pequeño renuncias a muchas cosas para llegar aquí. Yo empecé con nueve años, pero he corrido en buenos equipos y estoy orgulloso con lo que he hecho, pero hay chavales que han hecho el mismo sacrificio y no tienen sitio, y me da pena.
Se le nota satisfecho con lo que le ha dado el ciclismo, a pesar de que ha preferido ser un gregario cuando en su segundo año en Euskadi apuntó cosas buenas...
Estoy orgulloso de la gente que he conocido, me han tratado muy bien y he estado muy a gusto en todos los sitios y eso es raro. Si esto se termina sólo tengo palabras de agradecimiento al ciclismo. No he ganado una carrera, siempre he sido un trabajador y he estado a gusto. Como me decía mi amigo Txente, mediocre no hay que ser, en algo tienes que ser el mejor, aunque sea subiendo bidones. Eso se me quedó grabado. Aquel año acabé la Dauphiné entre los diez primeros, pero es mejor ser un buen trabajador, que vas a tener continuidad, que disputar carreras y hacer el quinto. Eso no vale para nada. Yo encajaba en el rol de gregario, me he situado ahí y le he sacado partido y soy feliz con lo realizado. Me da pena por la afición o mi peña, que quiere que gane, pero no todos valen para ganar. Hay gente que vale para trabajar. Para que un equipo funcione, cada corredor debe hacer bien lo suyo, no pueden salir los ocho a ganar. Seis deben trabajar y dos buscar ganar. Si no, no hay nada que hacer.
Y además de trabajar, hay que crear buen ambiente...
Hay que crear buen ambiente dentro del equipo y otras cosas. En situaciones complicadas de carrera hay que saber moverse. Eso vale mucho, sobre todo si eres veterano y tienes ganas de enseñar porque hay gente veterana que tiene escuela, pero no tiene ganas de dar clases. Y eso no es válido para un equipo.