El Portugalete volvió a caer goleado en Mestalla, fruto de la diferencia de calidad de su oponente quien, pese a jugar con los suplentes, demostró que tiene jugadores de muchos kilates en su cantera.

Con la ventaja casi insalvable de la ida, el Valencia jugó cómodo y con ganas de agradar a los poco más de cinco mil aficionados que se dieron cita en las gradas de Mestalla. Mientras, los jarrilleros bastante hicieron con aguantar las acometidas de los locales, muchos de ellos dispuestos a demostrarle a Emery que tienen un hueco en la primera plantilla.

Pese a que el «Portu» se mostró como un conjunto ordenado, el dominio local fue total en el primer periodo, con posesiones muy largas de balón, pero pocas aproximaciones ante la bien colocada defensa vasca.

Acción aislada de Angulo

Sólo una acción aislada -Angulo aprovechó un robo de balón para batir a Borja en un mano a mano- provocó que la escuadra vizcaina encajara su primer gol antes de que llegara el descanso.

Tras el paso por vestuarios, el jugador del filial valencianista Michel puso la segunda diana y Pablo sentenció el marcador mediado el segundo periodo. A partir de ahí, ambos equipos introdujeron cambios, pero no varió la dinámica del choque.

Las dos goleadas encajadas por el «Portu», tanto en la ida como en la vuelta copera, no empañan el fantástico papel protagonizado por los jarrilleros en el campeonato del K.O., dado que ha sido el único conjunto de la Tercera División que ha conseguido llegar tan lejos, alcanzando los dieciseisavos de final.

Pese a la diferencia de nivel entre ambas escuadras, los vizcainos tiraron de casta en su primer enfrentamiento en Lasesarre y se tomaron como un premio medirse al actual campeón del torneo. Ahora deberán centrarse en la liga, su verdadero campeonato y el que puede posibilitarles una nueva participación copera.