La Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Gasteiz instó ayer a BBK y a la Diputación vizcaina a que paralicen el desalojo de la residencia Reina de la Paz, en el bilbaino barrio de Ibarrekolanda, y atiendan las demandas de los ancianos.

En el debate se denunció que los afectados y sus familias conocieron los planes de la Caja a través de los medios de comunicación. Además, se informó de que 150 usuarios que rondan los 85 años se niegan a abandonar el centro a pesar de las presiones de la entidad que preside Xabier de Irala. El PNV defiende la operación y el desalojo.

A convocatoria de la plataforma BesteBi, decenas de ciudadanos se concentraron ayer en las torres de Isozaki, en Bilbo, para reivindicar amparo institucional y social para el centenar largo de personas «sin hogar» que habitan en las calles de la capital y en otras localidades vizcainas.