Con motivo de la declaración de Joseba Permach ante el TSJPV, en relación a la causa abierta contra EHAK por el juez español Baltasar Garzón, decenas de simpatizantes de la izquierda abertzale se congregaron ante el Palacio de Justicia en una concentración convocada por la izquierda abertzale bajo el lema «Salbuespen egoerari stop. Euskal Herriak autodeterminazioa». Permach, que fue detenido junto a varios militantes independentistas en la operación policial de octubre de 2007 en Segura, llegó a Bilbo desde la prisión salmantina de Topas, donde actualmente se encuentra preso, minutos antes de las 10.30, y fue introducido en el edificio a través del garaje, en medio de un fuerte dispositivo desplegado por la Ertzaintza en el exterior.

Durante la concentración, el militante independentista Julen Aginako denunció la «política de chantaje y venganza» que emplea en Gobierno español al aplicar la dispersión a los prisioneros, recordando que el mahaikide zarauztarra tuvo que recorrer cientos de kilómetros desde el punto en el que está cautivo hasta la capital vizcaina.

Por otro lado, Aginako subrayó que tanto Joseba Permach como el resto de mahaikides se encuentran hoy en prisión «por defender el futuro de este pueblo y una alternativa para conseguir la democracia, porque saben que el conflicto político sólo se puede superar a través de la democracia, y democracia para Euskal Herria significa el reconocimiento de los derechos de autodeterminación y territorialidad».

Asimismo, denunció ante los medios que «el estado de excepción que se ha aplicado en Euskal Herria es una dictadura disfrazada de democracia», señalando que «como en el franquismo, ilegaliza partidos políticos, detiene a cientos y cientos de militantes políticos, aplica la tortura, se persigue la ikurriña y se niega el derecho a existir a Euskal Herria, se le niega la voz y la palabra».

El militante abertzale advirtió, a este respecto, que «la represión no es la solución» y, en ese sentido, recordó que «decenas de años de conflicto político han demostrado que con la represión no se va a ningún sitio».

Por ello, aseguró que «con la represión tampoco se pueden frenar las ansias de marco democrático que la mayoría de la sociedad vasca tiene».

El urduñarra citó que Josu Muguruza y Santi Brouard, «también mahaikides y electos que fueron asesinados por el GAL, defendían un alternativa que decía que la autodeterminación es la solución», añadiendo que «la solución pasaba por dar la palabra a la nación vasca en su conjunto, a los 3 millones de ciudadanos y ciudadanas vascas y a los 7 herrialdes».

Finalmente, reiteró que «ese es nuestro camino y esa es nuestra apuesta», explicando que el conflicto político «se debe solucionar con ese cambio político que la sociedad vasca reclama».

Causa abierta por Garzón

La declaración del mahaikide Joseba Permach ante el magistrado del TSJPV Antonio García está enmarcada dentro de la causa que inició el juez de la Audiencia Nacional española Baltasar Garzón contra EHAK, partido que hoy se halla ilegalizado por el Tribunal Supremo.

Garzón abrió el procedimiento contra la formación abertzale, en el que se encuentran encausadas unas treinta personas, pero decidió inhibirse en el caso de cinco de ellos, que serán juzgados por el TSJPV.

La Fiscalía reclamó trasladar a ese tribunal el caso contra dos de las procesadas, las parlamentarias de Ezker Abertzalea Nekane Erauskin y Karmele Berasategi, debido a su condición de aforadas, mientras que la defensa solicitó que fuera el TSJPV el encargado de juzgar a todos los imputados en esta causa.

Sin embargo, la Sala de lo Civil y lo Penal de este tribunal sólo se declaró competente en el caso de Erauskin, Berasategi, el presidente de la formación Juan Carlos Ramos y los tesoreros Jesús María Agirre y Sonia Jacinto. Todos declararon en sede judicial entre el 30 y 31 del pasado mes de octubre.