Los medios audiovisuales públicos franceses tuvieron ayer un día agitado debido al amplio seguimiento de la huelga en protesta por la reforma propugnada por el presidente Nicolás Sarkozy, y que era examinada por los diputados de la Asamblea Nacional. Esta medida, que es vista como un ataque a la independencia de los medios públicos, prevé la supresión por etapas de la publicidad en los medios audiovisuales públicos desde 2011 (el gobierno promete compensar el «agujero» con el producto de las tasas suplementarias impuestas las cadenas privadas y los operadores de telecomunicaciones). La huelga afectó a los programas de las antenas de Radio France y de France 2, principal cadena pública, mientras que en France Télévisions (cinco cadenas), la incidencia fue del 40 %, y el informativo de mediodía de France 2 tuvo que ser suprimido. Los sindicatos están preocupados por lo que supondrá buscar una financiación de 450 millones de euros anuales en publicidad.