La realizadora argentina Lucrecia Martel ha evidenciado en sus primeros dos largos tener un estilo muy personal, al que sigue fiel en «La mujer rubia». Producida por los hermanos Almodóvar y presentada en el Festival de Gijón, esta tercera película remite a «La ciénaga» y «La niña santa». La actriz María Onetto da vida a la mujer del título, la cual se ve afectada por un incidente sufrido al volante de su coche. En un momento de distracción cree sentir un fuerte golpe en el vehículo, pero sigue su camino de forma instintiva. Después sabrá que hubo una víctima de atropello, lo que provocará en su estado de animo la duda y la carga de la culpa moral, aunque trate de aislar socialmente el hecho.