La prisionera política de Donostia Axun Gorrotxategi se encuentra en huelga de hambre desde el pasado lunes para exigir que se le practiquen unas adecuadas pruebas médicas por los dolores que padece en una costilla desde hace meses.

La donostiarra fue detenida, junto a otros ciudadanos vascos, en julio de 2003 en México. Después de permanecer varios meses encarcelada en el país americano, la presa política fue enviada a Madrid tras un proceso de extradición. Gorrotxategi ya fue visitado por un médico hace nueves meses, pero, al parecer, este no encontró nada. Sin embargo, los dolores de la donostiarra han ido en aumento en este tiempo, y es por lo que exige un reconocimiento médico adecuado para saber de qué se trata y, así, poder tratarlo médicamente.

Entrega de Morcillo

En el día de ayer se supo también que París entregó a Madrid a la prisionera política Grazia Morcillo, después de que haya cumplido la condena que le impusieron los tribunales franceses tras su arresto en enero de 2006.

Morcillo contaba con dos peticiones de extradición por los distintos procesamientos con las que cuenta en la Audiencia Nacional española. Así, ayer fue encarcelada de forma preventiva para que hoy comparezca ante dos salas de instrucción del tribunal especial.

En apoyo a los presos y a los vascos que a partir del próximo 9 de diciembre serán juzgados en París, la Gazte Asanblada de Baiona ha organizado una comida popular en «La Ferme» Urtxoa de la capital labortana a las 12.30. En defensa de los derechos de los presos, el miércoles, 40 personas de concentraron en el campus de Leioa, 20 en el de Enekuri en Bilbo, 10 en San Mamés y otros 10 en la facultad de La Casilla.

A su vez, ayer, en Burlata fueron 80 los que se movilizaron, 60 en Eibar, 50 en el barrio iruindarra de Arrosadia, 50 en Txantrea y 82 en el barrio de Iturrama.