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El Consejo de Desarrollo estudia la conveniencia de crear una marca territorial

El Consejo de Desarrollo ha abordado dos nuevos proyectos. Por un lado, analizará la oportunidad de una marca territorial Pays Basque y, por otro, reflexionará sobre un marco para las relaciones sociales.

Arantxa MANTEROLA |

Tras la puesta en marcha en setiembre pasado del nuevo Contrato Territorial, el presidente del Consejo de Desarrollo (CD) Jean-Baptiste Etcheto acompañado de Pierre Mendiboure, Caroline Phillips y Battita Boloki, presentó ayer en Baiona dos nuevos proyectos que acaban de poner en marcha. Por un lado, el estudio de la oportunidad de crear una marca territorial Pays Basque y, por otro, abordar el análisis de las relaciones entre las organizaciones de trabajadores y empresarios.

Mendiboure, miembro de la ejecutiva del CD, manifestó que el tema de una marca que refleje la imagen de los tres territorios es una reflexión que viene de lejos. Según el presidente de Herrikoa, existe unanimidad en cuanto al valor comercial añadido que constituye dicha imágen. Se trataría, por tanto, de «capitalizar» las iniciativas ya existentes, en especial en el sector agro-alimentario, y extenderlas a otros sectores como el turismo, la cultura, los servicios o la artesanía.

Señaló, sin embargo, que «la legitimidad» sobre la utilización de esa imágen ha generado debate y, por ello, ven necesario realizar «un estudio de los valores colectivamente aceptados para establecer de modo consensuado unas referencias comunes que definan la marca territorial». A tal fin, un grupo de trabajo de 50 personas y un comité técnico elaborarán una Carta para mediados de abril que esperan sea aceptada por los agentes económicos y sociales a fin de que, en una segunda fase, cada sector la concrete según sus peculiaridades.

Innovar el diálogo social

La vicepresidenta del CD, Caroline Phillips, se encargó de presentar el segundo proyecto, consistente en abordar la reflexión sobre la puesta en marcha de un espacio de convergencia de los diferentes partenaires sociales. Más allá de las relaciones habituales entre trabajadores y empresarios «que casi siempre se dan en situaciones de conflicto y crisis», Phillips remarcó que es necesario «estructurar un diálogo social entre ambas partes para actuar conjuntamente en favor del desarrollo del País vasco y del bienestar de sus habitantes».

«Tenemos mucho que aportar los unos a los otros en materias como condiciones de vida de los trabajdores, vivienda, ahorro salarial, igualdad profesional, adaptación a la competencia acarreada por la mundialización, etc.» añadió la también vicepresidenta del Medef vasco.

VOLUNTAD

14 organizaciones profesionales vascas están dispuestas a elaborar la propuesta en torno a las nuevas relaciones sociales: CGPME, CFDT, LAB, UPA, CGT, MEDEF, UNSA, FO, Lantegiak, CFTC, URSCOOP, FDSEA, ELB y FCE.

ACICATE

Jean-Baptiste Etcheto, muy implicado en la reflexión sobre el nuevo diálogo social, está convencido de que la crisis actual «no es un freno para el reto que nos hemos planteado, sino más bien al contrario, debe ser un acicate».

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