Sarkozy anuncia un plan económico bianual de 26.000 millones euros
La presentación de planes de relanzamiento económico en los diferentes estados de la Unión Europea no cesa. Se trata de poner en marcha ayudas a diferentes sectores económicos para que logren activar la actividad económica. Ayer, Nicolas Sarkozy anunció un plan bianual de 26.000 millones para atender a los sectores de la automoción y de la construcción que, a su juicio, son los que «se encuentran en el epicentro de la crisis económica profunda».
GARA |
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, anunció un plan de relanzamiento de la economía que costará del orden de los 26.000 millones de euros en los próximos dos años y que concede una atención especial al sector del automóvil y al de la construcción, que, como señaló, se encuentran en el «epicentro» de la crisis económica.
En un esperado discurso pronunciado en presencia de la plana mayor del Gobierno francés en la localidad de Douai, en el norte del Hexágono, Sarkozy confirmó la puesta en marcha de un incentivo de 1.000 euros para quienes compren un coche nuevo y menos contaminante y lleven el viejo al desguace. Advirtió a los constructores del sector que el Estado no apoyará a quienes «deslocalicen su producción en el extranjero» y que no permitirá el desmantelamiento del tejido industrial.
En cuanto al sector de la construcción, Sarkozy anunció la creación de un fondo para la renovación de viviendas y la construcción o compra de 100.000 alojamientos sociales en los dos próximos años. Anunció, asimismo, que duplicará el número de préstamos a interés cero para la compra de viviendas nuevas. El presidente francés puso el acento en la idea de que la mejor respuesta a una crisis que «no es ni pasajera ni coyuntural» es ofrecer «un esfuerzo masivo de inversión» para recuperar el retraso en materia de competitividad que sufre la actividad francesa, como afirmó.
Aceleración de proyectos
En este contexto enmarcó la aceleración de proyectos de obra pública «que duermen en las cajas de los ministerios» y que supondrán una inversión del orden de 10.500 millones de euros en los años 2009 y 2010. También garantizó la devolución por parte del Estado de 11.000 millones a las empresas para mejorar sus niveles de tesorería.
Las medidas anunciadas se unen al resto de iniciativas que el jefe del Estado galo viene poniendo encima de la mesa desde hace meses. Así, hasta la fecha ha presentado un plan de apoyo a las pyme dotado con 22.000 millones de euros y una garantía del Estado para los préstamos interbancarios por valor de 320.000 millones. A ello se añade la inyección de 10.500 millones para los seis principales bancos franceses, de un total de 40.000 millones para recapitalizar el sector financiero, y un fondo estratégico de inversiones para apoyar a las empresas con 20.000 millones de euros. El Estado francés va camino de la recesión y su crecimiento podría contraerse cuatro décimas en 2009, según las previsiones de la OCDE.
El déficit presupuestario puede alcanzar el 2,9% y dispararse hasta el 3,9% en 2010, mientras que la deuda pública alcanzaría el récord del 70% del PIB en dos años. En términos de empleo, ha visto crecer en 46.900 el número de nuevos parados en el mes de octubre, pasando así la barrera de los dos millones de desempleados, la cifra más alta desde abril de 2007. En un año, el número de solicitantes de empleo ha crecido un 4,4% y la OCDE estima en un 8,7% la tasa de paro para 2010.
La canciller alemana, Angela Merkel, defendió ayer las medidas aprobadas por su gobierno para reactivar la actividad frente a las críticas europeas y subrayó que se trata de uno de los paquetes más cuantiosos de toda Europa.
«Con los 32.000 millones de euros que queremos aprobar en el Parlamento nos situamos entre los países de la Unión Europea que darán más impulsos a la actividad», dijo Merkel un una declaración ante el Bundestag con motivo del próximo Consejo Europeo. Merkel recordó que los planes de la Comisión Europea contemplan un paquete adicional de impulso a las inversiones por valor de 200.000 millones, lo que supone el 1,5% del PIB de la UE.
De este total, la CE asumirá 30.000 millones de euros, y el resto espera conseguirlo de los socios de la UE.
La canciller insistió en que, vistos los números, «nuestro paquete es presentable». No obstante, Merkel no quiso excluir que, en caso de necesidad, Alemania habilite nuevos fondos. «Hemos dicho que analizaremos el curso de la crisis, puse la situación va cambiando; a comienzos de año veremos lo que hacemos, pero ahora mismo no podemos decir si aprobaremos medidas adicionales», manifestó. Además de abordar en su declaración el programa coyuntural adelantó en el ámbito medioambiental que Alemania, como «locomotora europea», defenderá con firmeza que la protección del clima no se haga a costa del empleo. Aunque reafirmó su apoyo a los objetivos de reducir hasta 2020 las emisiones de CO2 en un 20% con respecto a 1990.
